concentración en homenaje a Fidel Castro en Buenos Aires |
Amo que los niños, o los ancianos, o los jóvenes, caminen felices por Cuba, sin los riesgos que existen en las sociedades capitalistas, donde hay calamidades a diario, violencia a raudales, abuso a granel. Cuba, por buena, por noble, por revolucionaria, es bloqueada desde hace más de medio siglo por el centro del Mal en el mundo, que es Estados Unidos, y sin embargo el pueblo cubano tiene los derechos básicos garantizados y su sociedad no es una sociedad caníbal, como sucede en Norteamérica y en la mayoría de los países de este planeta, aún mayoritariamente capitalista. Y algo tiene que ver Fidel Castro en todo eso.
De la misma manera que algo tiene que ver Fidel Castro con que, por ejemplo, la epidemia de cólera en Haití no haya sido desvastadora (mientras al mismo tiempo la Fundación Clinton malversaba las donaciones que recolectaba "para ayudar a los damnificados por el terremoto en Haití"). Algo tendrá que ver Fidel Castro con la Independencia de Angola y Namibia, y con el fin del Apartheid en Sudáfrica, y con la liberación de Mandela de la cárcel de los racistas. Algo tendrá que ver Fidel Castro con tantas cosas buenas en este mundo...
¡Pero qué carajo les importa a los banales la justicia, la felicidad del bien común, la armonía social! ¡Qué mierda les interesa a esos idiotas que están pendientes de lo que se van a comprar en el shopping y no del dolor de algún prójimo abusado por la gerontocracia genocida de los mercaderes sin patria! ¡Qué corno les importa a los bobos que viven en pose y que son la base social de lo más pérfido y dañino que sufre el mundo! ¡Qué puta madre le importa a los livianos el bien y el mal!!!! ¿Cómo van a entender estos desvergonzados quien fue Fidel Castro?
Por eso me molesta tener que explicar que la luz ilumina, o que dos más dos es cuatro, o que Fidel Castro merece todos los homenajes, y merece, y obliga, a que sigamos su ejemplo inmenso. Está tan claro... que el que no lo entiende es porque no quiere, y está haciendo una elección moral concreta, que es estar del lado de los cagadores. Es así de claro.
¡Bienvenido a la eternidad, Fidel Castro!
Estás vivo en los mejores, en los más generosos, en los que luchan contra el egoísmo, por la justicia, por el amor, por la solidaridad, por el Socialismo.
¡Bienvenido a la eternidad, Fidel Castro!
Estás vivo por los siglos de los siglos a lo largo de la Historia, esa que no sólo te absolvió, sino que se vió honrada, constituída, fortalecida, por caudillos como Usted, esos que fundan pueblos, estados, epopeyas.
Buenos días, Comandante. Aquí estás, guiándome, guiándonos. Aquí estás, más vivo que nunca, alimentando los sueños más gloriosos.
Y ahora sí, algunas de las fotos que saqué de la concentración que se hizo en Buenos Aires el 29 de noviembre, como en tantos otros lugares a lo largo y a lo ancho en el mundo, en homenaje a este guerrero del Bien.
Un abrazo a todos.
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