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domingo, 19 de agosto de 2018

¿NO HAY UNA QUINTA COLUMNA EN EL KREMLIN? ¡VUELVE A PENSARLO!

por The Saker, en The Vineyard of The Saker. Traducción de Leonardo Del Grosso, de Comunidad Saker Latinoamérica. En Comunidad Saker Latinoamérica

 

[este análisis fue escrito para The Unz Review]

Los mercaderes conspiran contra Putin

Tras la re-designación de Medvedev y su más o menos remodelado gobierno, la opinión pública en Rusia y en el extranjero se dividió sobre si esto era una buena señal de continuidad y unidad entre los líderes rusos o si esto era una confirmación de que había una 5ta. columna dentro del Kremlin trabajando contra el presidente Putin e intentando imponer políticas neoliberales y pro-occidentales al pueblo ruso. Hoy quiero echar un vistazo rápido a lo que está sucediendo dentro de Rusia porque creo que la política exterior rusa está todavía predominantemente controlada por lo que yo llamo los “soberanos euroasiáticos” y que para detectar las actividades de los tipo “integracionistas atlánticos” necesito ver lo que está sucediendo dentro de Rusia.

La 5ta. columna rusa y sus típicas operaciones
Primero, quiero comenzar compartiendo con ustedes un breve video, traducido por la Comunidad Saker, de uno de los analistas rusos más astutos, Ruslan Ostashko, que se pregunta cómo es que una estación de radio rabiosamente pro-occidental y vociferantemente anti Putin llamada “Ekho Moskvy” (“eco de Moscú”), logra no sólo eludir la legislación rusa normal, sino que incluso obtiene dinero del gigante del gaz Gazprom, que es propiedad mayoritaria del estado ruso. Ekho Moskvy también es tan pro-israelí que se ganó el apodo de “Ekho Matsy” (Ekho Moskvy significa “Eco de Moscú”, mientras que “Ekho Matsy” significa “Eco del Matzo”). Huelga decir que la radio tiene el apoyo total e inquebrantable de la Embajada de los Estados Unidos. No sería una exageración decir que Eco de Moscú sirve como una incubadora para periodistas rusofóbicos y que la mayoría de los periodistas liberales pro-occidentales en los medios rusos han estado, en un momento u otro, asociados con este equipo de propaganda. A pesar de esto o, más exactamente, debido a esto, Eco de Moscú ha estado en bancarrota desde hace bastante tiempo, y sin embargo, sigue existiendo. Sólo escucha las explicaciones de Ostashko (y asegúrate de presionar el botón ‘cc’ para ver los subtítulos en inglés):


Interesante, ¿no? El gigante estatal Gazprom está haciendo todo lo posible para mantener a Eco de Moscú a flote y por encima de la ley. ¡De hecho, Gazprom ha estado financiando a Eco de Moscú durante años! Según la Wikipedia hiperpolíticamente correcta: “desde 2005, Eco de Moscú es propiedad mayoritaria de Gazprom Media, que posee el 66% de sus acciones”. Si Gazprom es propiedad mayoritaria del estado ruso, y Eco de Moscú es propiedad mayoritaria de Gazprom, ¿no significa eso que Eco de Moscú está financiado básicamente por el Kremlin? La realidad es aún peor, como señala Ostashko, Eco de Moscú es el caso más visible, pero hay bastantes medios de comunicación pro-occidentales en Rusia que están financiados, directa e indirectamente, por el estado ruso.
Así que déjame hacerte una simple pregunta: ¿de verdad crees que Ostashko está mejor informado que las autoridades rusas, incluido el propio Putin?
¡Por supuesto no! Entonces, ¿qué está pasando aquí?
Antes de intentar responder esta pregunta, veamos otra noticia interesante de Rusia, el reciente artículo “la reforma de pensiones como una herramienta de quinta columna para derrocar a Putin” (título original “Acerca de un sistema de pensiones justo”), de Mikhail Khazin, traducido por Ollie Richardson y Angelina Siard del blog de Stalker Zone (y publicado de manera cruzada aquí y aquí). Por favor, lea el artículo completo, ya que arroja una luz muy interesante sobre lo que ha estado haciendo el gobierno de Medvedev desde que volvió a ser nombrado. Lo que quiero citar aquí son las conclusiones de Mikhail Khazin: (énfasis añadido)

En otras palabras, toda esta reforma es “frank poppycock” (tonterías. Nota del traductor), una broma política destinada a destruir las relaciones entre el pueblo (sociedad) y las autoridades. El objetivo específico de esto es derrocar a Putin, ya que a nuestros liberales sus socios principales del proyecto global “occidental” les han ordenado que lo hagan. Y es precisamente así que deberíamos tratar esta reforma. No tiene relación con las reformas económicas, ni es bueno, ni malo. ¡Esto no es una reforma económica, sino un complot político! Y es desde aquí que tenemos que proceder.

Habiendo explicado lo que realmente está sucediendo, Khazin luego continúa diciendo abiertamente cómo tal operación es posible:

Ahora respecto de los medios de comunicación. Debe entenderse que entre fines de la década de los 90 y comienzos de la década del 2.000 prácticamente todos los medios no liberales murieron. Completamente. Y, por supuesto, prácticamente todos los periodistas no liberales definitivamente murieron (sólo quedan unas pocas docenas de mastodontes de los tiempos del socialismo). Y los jóvenes que crecieron desde las facultades de periodismo son en general totalmente liberales. Fueron un poquitín reprimidos a mediados de la década de 2.000, pero después de la llegada de Medvedev al cargo de presidente, ellos volvieron a florecer. Pero luego comenzó el ataque del Estado contra todo lo que no refleja “las políticas del partido y el gobierno”. Y entonces sucedió que ahora hay muchas publicaciones “patrióticas” en Rusia que emplean principalmente periodistas liberales. Una vista encantadora. ¡Estos periodistas (en total acuerdo con las ideas de Lenin sobre que no han leído) consideran que su principal tarea es apoyar a “los suyos”, por ejemplo, los financistas liberales, Nemtsov, Navalny y demás, y mancillar al “maldito KayGeeBee”! Y es en esto en lo que están involucrados, lo que significa que, propagandizando lo más posible las políticas del gobierno, irritan a la población de manera óptima al usar la persona de Putin. Cada vez es más necesario representar una historia desagradable (cómo murió un anciano en el camino al policlínico o al hospital, cómo se llevaron a los niños de una familia grande, cómo un funcionario o un sacerdote golpea a una mujer embarazada y/o niños menores con su elegante automóvil), para explicar que esto no es justamente el resultado de las políticas del poder liberal, sino la falla concreta del Presidente, que pone en sus puestos a los propios ministros y agentes de la ley que alientan todo esto.

Sorprendente, ¿no? Este es un intento de derrocar a Putin y está cubierto por la (pseudo) prensa patriótica. ¿Qué hay del propio Putin? ¿Por qué él no toma medidas? Khazin incluso explica que:

Por supuesto, el presidente es culpable, en primer lugar, porque entiende que si comienza a limpiar este “establo de Augías“, entonces se verá obligado a derramar sangre, porque no devolverán voluntariamente sus privilegios. Pero lo más importante, y esta es la esencia: la élite liberal rusa se propuso hoy la tarea política de eliminar a Putin. Por qué decidió hacer esto es una pregunta interesante: si el propio Putin y un liberal son carne de carne, entonces esta tarea es estúpida y sin sentido. Por no mencionar suicida. Pero si él no es liberal (probablemente sea correcto decir que no es un liberal político) entonces, por supuesto, esta actividad tiene sentido. Pero, al mismo tiempo, por razones puramente de propaganda, porque la gente odia a los liberales, es necesario colgarle la etiqueta de liberal político.

Ahora conectemos todos los puntos: aquí hay una facción pro-occidental (en realidad, controlada por Occidente) dentro del gobierno que está financiando a aquellos que intentan derrocar a Putin haciéndolo impopular en el público ruso en general (público que se opone abrumadoramente a las políticas económicas “liberales” y que desprecia a las élites liberales rusas) al forzarlo constantemente a políticas económicas liberales que claramente no le gustan (se declaró categóricamente contrario a tales políticas en 2005) y los llamados “medios patrióticos” lo están cubriendo promocionadamente. Y Putin no puede cambiar esto sin derramar sangre.
Pero déjenme suponer, en beneficio de la argumentación, que Putin es realmente un liberal de corazón y que cree en el tipo de economía del “Consenso de Washington“. Incluso si este fuera el caso, seguramente debe ser consciente de que el 92% de los rusos se oponen a esta así llamada “reforma”. Y mientras el vocero presidencial, Dmitri Peskov, declaró que el propio Putin no estaba asociado con este plan, la verdad es que este proceso también perjudica su imagen política con el pueblo ruso y los movimientos políticos. Como resultado directo de estos planes, el Partido Comunista de Rusia está lanzando un referéndum contra este proyecto, mientras que el partido “Rusia Justa” ahora está recogiendo firmas para despedir a todo el gobierno. Claramente, se está gestando una lucha política de proporciones monumentales y la oposición interna a Putin, tradicionalmente bastante renga (estoy hablando de los principales movimientos y partidos políticos, no pequeñas “ONGs” apoyadas por la CIA y/o Soros) está ahora transformándose en una clase de oposición mucho más determinada. Predije eso hace aproximadamente un mes cuando escribí que:

“Es bastante claro para mí que un nuevo tipo de oposición rusa se está formando lentamente. Bueno, siempre existió, de verdad, estoy hablando de personas que apoyaron a Putin y la política exterior rusa y que no simpatizaron con Medvedev y las políticas internas rusas. Ahora la voz de aquellos que dicen que Putin es demasiado blando en su postura hacia el Imperio sólo se fortalecerá. Al igual que las voces de aquellos que hablan de un grado verdaderamente tóxico de nepotismo y mecenazgo en el Kremlin (una vez más, Mutko es el ejemplo perfecto). Cuando tales acusaciones vinieron de rabiosos pro-occidentales liberales, tuvieron muy poca tracción, pero cuando provienen de políticos patrióticos e incluso nacionalistas (Nikolai Starikov, por ejemplo) comienzan a tomar una dimensión diferente. Por ejemplo, mientras el bufón de la corte Zhirinovskii y su partido LDPR apoyaron lealmente a Medvedev, los partidos Comunista y Rusia Justa no lo hicieron. A menos que la tensión política en torno a figuras como Kudrin y Medvedev se resuelva de alguna manera (¿tal vez un escándalo oportuno?), podríamos ser testigos del crecimiento de un verdadero movimiento de oposición en Rusia, y no uno dirigido por el Imperio. Será interesante ver si las calificaciones personales de Putin comenzarán a disminuir y lo que tendrá que hacer para reaccionar ante la aparición de una oposición tan real”.

Aquellos que negaron con vehemencia que haya un problema real con la 5ta. columna dentro del Kremlin van a tener un doloroso llamado de atención cuando se den cuenta de que gracias a las acciones de estos “liberales” gradualmente está surgiendo una oposición patriótica, no tanto contra Putin mismo sino en contra de las políticas del gobierno de Medvedev. ¿Por qué no contra Putin?
Porque la mayoría de los rusos siente instintivamente lo que está sucediendo y comprende no sólo la dinámica anti-Putin en el trabajo del día a día, sino también cómo y por qué se creó esta situación. Además, a diferencia de la mayoría de los occidentales, la mayoría de los rusos recuerda lo que sucedió en los cruciales y formativos años 90.

Las raíces históricas del problema (resumen muy aproximado)
Todo comenzó a finales de la década de 1980 cuando las élites soviéticas se dieron cuenta de que estaban perdiendo el control de la situación y que había que hacer algo. Para resumir realmente lo que hicieron, diría que estas élites primero dividieron el país en 15 feudos individuales, cada uno dirigido por una pandilla compuesta de estas élites soviéticas, luego agarraron sin piedad todo aquello de valor, se convirtieron en multimillonarios y ocultaron su dinero en Occidente. Ser fabulosamente rico en un país completamente arruinado les dio un poder político y una influencia fantásticos para explotar aún más y robar al país todos sus recursos. Rusia misma (y las otras 14 ex repúblicas soviéticas) sufrió una pesadilla indescriptible comparable a una gran guerra y en la década de 1990 Rusia casi se rompió en muchas piezas más pequeñas (Chechenia, Tartaristán, etc.). Para entonces, Rusia estaba ejecutando servilmente todas las políticas económicas recomendadas por una miríada de “asesores” estadounidenses (cientos de ellos con oficinas dentro de las oficinas de muchos ministerios clave y varias agencias estatales, al igual que hoy en Ucrania), adoptó una Constitución redactada por elementos pro-estadounidenses, y todas las posiciones clave en el Estado estaban ocupadas por lo que sólo puedo llamar agentes occidentales. En la parte superior, el presidente Yeltsin estaba predominantemente ebrio mientras el país era dirigido por 7 banqueros, los así llamados “oligarcas” (6 de los cuales eran judíos): los “Semibankirshchina“.
Este es el momento en que los servicios de seguridad rusos engañaron a estos oligarcas para que creyeran que Putin, que tiene un título en derecho y que había trabajado para el alcalde (muy liberal) de San Petersburgo (Anatolii Sobchack), era sólo un burócrata insignificante que restauraría una apariencia de orden sin representar una amenaza real para los oligarcas. La estratagema funcionó, pero las élites empresariales exigieron que “su” tipo, Medvedev, se pusiera a cargo del gobierno para preservar sus intereses. Lo que pasaron por alto fueron dos cosas: Putin era un oficial verdaderamente brillante de la élite del Primer Directorado General (Inteligencia Extranjera) de la KGB y un verdadero patriota. Además, la Constitución, que fue aprobada para apoyar el régimen de Yeltsin, ahora podría ser utilizada por Putin. Pero más que cualquier otra cosa, nunca predijeron que un hombre pequeño con un traje ajustado se transformaría en uno de los líderes más populares del planeta. Como he escrito muchas veces, mientras que la base de poder inicial de Putin estaba en los servicios de seguridad y las fuerzas armadas, y aunque su autoridad legal se deriva de la Constitución, su poder *real* proviene del inmenso apoyo que tiene del pueblo ruso que, por primera vez en mucho tiempo, sintió que el hombre en la cima realmente representaba sus intereses.
Putin hizo lo que Donald Trump pudo haber hecho tan pronto como entró a la Casa Blanca: limpió la casa. Comenzó por abordar de inmediato a los oligarcas, puso fin a la Semibankirshchina y detuvo la exportación masiva de dinero y recursos fuera de Rusia. Luego procedió a reconstruir la “vertical del poder” (el control del Kremlin sobre el país) y comenzó a reconstruir toda Rusia desde las fundaciones (regiones) hacia arriba. Pero aunque Putin fue tremendamente exitoso, simplemente no pudo luchar en todos los frentes al mismo tiempo y ganar.
A decir verdad, eventualmente ganó la mayoría de las batallas que eligió para pelear, pero algunas batallas simplemente no las pudo librar, no por falta de coraje o voluntad de su parte, sino porque la realidad objetiva es que Putin heredó una sistema extremadamente malo completamente controlado por algunos enemigos extremadamente peligrosos. Recuerda las palabras de Khazin más arriba: “si comienza a limpiar este ‘establo de Augías’, entonces se verá obligado a derramar sangre, porque no devolverán voluntariamente sus privilegios”. Entonces, de una manera típicamente Putin, hizo una serie de ofertas.
Por ejemplo, aquellos oligarcas que aceptaron dejar de inmiscuirse en la política rusa y que, de ahora en adelante, pagarían impuestos y cumplirían la ley, no serían encarcelados ni expropiados: a los que recibieron el mensaje se les permitió continuar trabajando como empresarios normales (Oleg Deripaska) y aquellos que no lo hicieron fueron encarcelados o exiliados (Khodorkovski, Berezovski). Pero si miramos justo por debajo del nivel de estos conocidos y notorios oligarcas, lo que encontramos es como un “pantano” mucho más profundo (para usar la expresión estadounidense): una clase completa de personas que hizo su fortuna en la década de 1990, que es ahora extremadamente influyente y controla la mayoría de las posiciones clave en la economía, las finanzas y los negocios, y los cuales detestan y temen a Putin. Incluso tienen sus agentes dentro de las fuerzas armadas y los servicios de seguridad porque su arma de elección es, por supuesto, la corrupción y la influencia. Y, por supuesto, tienen personas que representan sus intereses dentro del gobierno ruso: prácticamente todo el “bloque económico” del gobierno de Medvedev.
¿Es realmente sorprendente que estas personas también tengan sus representantes pagados en los medios de comunicación rusos, incluidos los llamados medios “pro-rusos” o “patrióticos”? (He estado advirtiendo sobre esto desde al menos 2015).
Al igual que en Occidente, en Rusia los medios de comunicación dependen, primero y sobre todo, del dinero. Los grandes intereses financieros son muy buenos para usar los medios de comunicación para promover su agenda, negando u ofuscando algunos temas, mientras empujan a otros. Esta es la razón por la que a menudo vemos a los medios rusos respaldando las políticas OMC/BM/FMI/ etc., sin criticar nunca a Israel o, Dios no lo quiera, propagandistas rabiosamente pro-israelíes en la televisión principal (tipos como Vladimir Soloviev, Evgenii Satanovsky, Iakov Kedmi, Avigdor Eskin y muchos otros). Éstos son los mismos medios de comunicación que con gusto criticarán a Irán y Hezbolá, pero nunca se preguntarán por qué los principales canales de televisión rusos están emitiendo propaganda pro-israelí a diario.
Y, por supuesto, todos repetirán mántricamente el mismo canto: “¡no hay una 5ta. columna en Rusia! ¡¡Ninguna!! ¡¡Nunca!!”
Esto no es diferente de los medios corporativos pagados en los Estados Unidos, que niegan la existencia de un “Estado profundo” o del “Lobby Israelí” de los Estados Unidos.
Y, sin embargo, muchas (¿la mayoría?) personas en los Estados Unidos y Rusia se dan cuenta casi a nivel intelectual de que se les está mintiendo y que, en realidad, un poder hostil está gobernando sobre ellos.

Las opciones de Putin y los posibles resultados
Tristemente, en los Estados Unidos, Trump resultó ser un desastre que cedió totalmente ante los neoconservadores y sus demandas. En Rusia, la situación es mucho más compleja. Hasta ahora, Putin ha evitado hábilmente asociarse con los integracionistas atlánticos. Además, las mayores crisis de la última década se asociaron con problemas de política exterior y aún están controladas por los soberanos euroasiáticos. Finalmente, aunque el gobierno ruso claramente cometió algunos errores o promovió algunas políticas impopulares (como la reforma de salud, por ejemplo), también tuvo sus innegables éxitos. En cuanto a Putin, continuó consolidando su poder y gradualmente eliminó a algunas de las personas más notorias de sus posiciones. En teoría, Putin podría haber arrestado a la mayoría de los principales integracionistas atlánticos por cargos de corrupción, pero a menos que participe en una sangrienta y masiva purga, no puede deshacerse de toda una clase social que no sólo es grande sino poderosa.
Algunos de mis contactos en Rusia esperaban una purga de integracionistas atlánticos justo después de las elecciones. La lógica aquí era “ya es suficiente” y, una vez que Putin obtuviera un fuerte mandato del pueblo, finalmente sacaría a Medvedev y su pandilla del Kremlin y los reemplazaría con patriotas populares. Eso obviamente no sucedió. Pero si este programa de reforma de las pensiones sigue provocando protestas o si estalla una gran guerra en el Medio Oriente o en Ucrania, las fuerzas pro-occidentales dentro del Kremlin estarán bajo una gran presión para ceder aún más el control del país a los soberanos euroasiáticos.
Putin es un hombre excesivamente paciente y, al menos hasta ahora, ha ganado la mayoría, si no todas, sus batallas. No creo que nadie pueda predecir con certeza cómo se desarrollarán las cosas, pero lo cierto es que intentar entender a Rusia sin ser consciente de los conflictos internos y los intereses de los grupos que luchan por el poder es inútil. En su historia de 1000 años, los enemigos internos siempre han sido mucho más peligrosos para Rusia que los externos. Es poco probable que esto cambie en el futuro.


ARGENTINA VUELVE AL TREN DE LA DEUDA

por Paul Sliker, entrevistando al economista Michel Hudson, en “el Informe Hudson”. En el blog de Michael Hudson. Traducción de Leonardo Del Grosso. Comunidad Saker Latinoamérica. En Comunidad Saker Latinoamérica



“EL INFORME HUDSON”: Argentina obtiene el mayor préstamo del FMI en la historia. 9 de julio de 2018.

Podcast de “Left Out”: En este episodio, Paul Sliker habla con Michael Hudson sobre las implicaciones económicas y políticas del préstamo del Fondo Monetario Internacional de 50 mil millones de dólares a Argentina, que es la línea de crédito más grande del FMI en la historia. Encuentra el audio aquí.

Paul Sliker: Michael Hudson, bienvenido al “Informe Hudson”.

Michael Hudson: Es bueno estar de vuelta. Mucho ha ocurrido mientras estuve afuera por unas semanas.

Paul Sliker: Miguel, Argentina recientemente acordó un préstamo de 50 mil millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional. Ese es el más grande en la historia del FMI. Se supone que debe funcionar durante 36 meses. Argentina inició conversaciones con el FMI el mes pasado, después de tres alzas de tasas del Banco Central. A pesar de presionar los costos de tomar créditos por sobre el 40% de interés, esto no detuvo la caída del peso, que ahora ha caído un 25% frente al dólar estadounidense este año.
Este acuerdo retrotrae una historia oscura para la mayoría de los argentinos respecto del papel del FMI allí durante su devastadora crisis económica en 2001-2002. El FMI impuso severas medidas de austeridad, como de costumbre. Esa es su básica política anti-trabajadores, por lo que la decisión de Argentina de regresar al FMI ha desencadenado enormes protestas nacionales en las últimas semanas.
A pesar de ser el préstamo más grande en la historia del FMI, en realidad no escuchamos nada al respecto en los medios de comunicación de EEUU, excepto por el típico informe breve en la prensa financiera. No hay un análisis político o económico real de esto, especialmente en la izquierda que, además contradecir la filosofía de austeridad del FMI, uno pensaría que sería más empática con el Sur Global.
Antes de entrar en el análisis del actual masivo acuerdo con el FMI: Usted es uno de los principales expertos mundiales en préstamos del FMI y el Banco Mundial; cuando estaba en el departamento de investigación económica del Chase Manhattan Bank, su función era ser especialista en balanza de pagos, y su tarea era establecer la capacidad de pago de Argentina, Brasil y Chile… Para dar a la gente una comprensión general del contexto histórico que conduce a lo que está sucediendo hoy, ¿puede contarnos un poco de historia sobre la última crisis económica argentina a principios de la década del 2000 y el papel del FMI en ese momento?

Michael Hudson: La razón por la cual hay tan poca discusión sobre los problemas de la deuda argentina o de otros países del Tercer Mundo es que casi nadie estudia la balanza de pagos (BOP, por sus siglas en inglés.). No existe un curso en contabilidad de balanza de pagos o incluso en Cuentas Nacionales de Ingresos y Productos (NIPA, por sus siglas en inglés) en ninguna universidad de EEUU. Los derechistas propagandistas de la Escuela de Chicago siguen afirmando que si la moneda de un país se está depreciando, debe ser porque sus precios están subiendo. Pero eso pone la línea de la causalidad en sentido inverso. Para los países deudores, como Argentina u otros países de América Latina, la balanza de pagos tiene poco que ver con los precios internos, los salarios internos o los costos internos de producción. La balanza de pagos, y por lo tanto, la tasa de cambio, se ve abrumada por el servicio de la deuda.
El servicio de la deuda se paga en lo que se llama Cuenta de Capital (Capital Account). Políticamente, la deuda pública denominada en dólares en estos países crece para cubrir su déficit comercial derivado de factores estructurales, como su acuerdo de no cultivar sus propios alimentos sino de depender de las exportaciones de granos estadounidenses, y de permitir las inversiones estadounidenses en sus países libres de impuestos. Estos son factores estructurales, no factores salariales y de precios.
Argentina es “el niño del afiche” de los países que han arruinado por completo su economía. Su oligarquía depredadora de derecha ha logrado dirigir a su país, de los más prósperos del mundo a fines del siglo XIX, hacia uno de los países más pobres y con mayor deuda. Este es un problema político. Pero la oligarquía culpa a los trabajadores y dice que debe pagarse aún menos salario.
En 1990, ayudé a organizar el primer fondo de bonos del Tercer Mundo. Fue emitido por Scudder, Stevens y Clark. En ese momento, en 1989-1990, Argentina estaba pagando el 45% anual por bonos en dólares. Brasil estaba pagando lo mismo. Ahora sólo imagina: 45% por año. ¡Eso duplica tu dinero en dos años! Ningún país puede pagar eso por mucho tiempo. Pero estaba claro que la dictadura argentina, sostenida por un programa de asesinatos patrocinado por Estados Unidos, contra líderes sindicales, reformistas agrarios y profesores de izquierda, continuaría pagando por lo menos cinco años. Así que ése fue el marco de tiempo del fondo.
A pesar de estas altas tasas de interés, no pudimos vender el fondo de bonos a ningún estadounidense o europeo. Pero Merrill Lynch, que suscribió el fondo de bonos, vendió todas sus acciones en Latinoamérica. El fondo estaba organizado en las Antillas Holandesas, por lo que era un fondo extraterritorial. Los estadounidenses (incluyéndome yo) no tenían permitido comprarlo.
Entonces, ¿quién lo compró? Los compradores de bonos resultaron ser las familias más ricas de Brasil y de Argentina. Creo que ya hablé de esto en tu programa. La deuda externa argentina era propiedad casi en su totalidad de la oligarquía doméstica argentina, la clase más rica. Movieron su dinero de la moneda nacional a dólares, comprando bonos en dólares porque sabían que iban a autorizar el alto interés que se les pagaba, para ellos mismos, interés disfrazado de “dólares yankis”.
Esta es la oligarquía que apoyó al golpe militar de los EEUU y Chile en 1973 que asesinó a Allende e instaló a Pinochet. Estados Unidos montó una campaña de terrorismo y asesinatos en masa en toda América Latina. En Argentina se llamaba “guerra sucia”. Los estadounidenses llegaron y aplicaron el principio económico de la Escuela de Chicago de que sólo puedes tener un mercado libre si estás dispuesto a asesinar a líderes sindicales, reformistas agrarios y profesores universitarios. Decenas de miles de reformistas argentinos fueron torturados y asesinados para poner a la oligarquía en el poder y reducir los impuestos a los altos ingresos. Sus leyes impositivas hacen que Donald Trump parezca un moderado. Y al igual que la mayoría de las élites financieras, ellas tomaron el dinero y corrieron, poniendo sus arrebatos en el extranjero, en bonos argentinos en dólares. Políticamente ellas denunciaron a los tenedores de bonos yankis por forzar enormes pagos de deuda al 45% al ​​año, lo que hizo que la moneda bajara, pero los “yankis” eran las familias más ricas que, en realidad, estaban cobrando. ¡Los verdaderos yankis estadounidenses simplemente no confiaron en los argentinos!
Cuando Scudder se acercó y habló con inversores estadounidenses en 1990, dijo que los políticos argentinos son unos delincuentes y que no iban a invertir en una cleptocracia cuya intención era engañarnos a nosotros como si engañaran a su propia gente.
Ahora, “fast forward” hasta 2001. El FMI intervino y siguió las instrucciones del Departamento de Defensa de EEUU y del Departamento de Estado para apoyar a la oligarquía y sus terroristas. La CIA temía que, de lo contrario, Argentina podría tener una democracia, ya que la ola de asesinatos del “mercado libre” se había apaciguado.
El personal del FMI vio que era obvio que Argentina no podía endeudarse más. Sin embargo, le prestaron a Argentina suficiente dinero para que los argentinos más ricos pudieran tener un tipo de cambio lo suficientemente apropiado para sacar su dinero del país y pasar a dólares. Fue un gran subsidio para la fuga de capitales de Argentina a través de la deuda argentina, denominada en dólares, con el FMI y otros tenedores de bonos.
Cualquier análisis realista de la balanza de pagos mostraría que Argentina no puede pagar esta deuda externa. El personal del FMI sabía que el dinero estaba siendo robado hacia afuera. Es como si prestaran a Ucrania. Eso no era un error, esa era una característica. El personal del FMI se molestó tanto, francamente disgustado con su liderazgo corrupto anti-trabajadores, pro-tenedores de bonos, que durante la próxima década el lema del FMI fue “no más Argentinas”.
Ya en 1965, en el Chase Manhattan yo había hecho un análisis de la balanza de pagos de Argentina y, por lo tanto, su capacidad para pagar el servicio de la deuda. Mi trabajo consistió en calcular la cantidad de divisas que la Argentina podía permitirse tomar prestada. Primero, calculé sus capacidades de exportación y sus necesidades de importación. Acordaron comprarle a Estados Unidos y volverse dependientes. Descubrí que Argentina ya estaba pagando todo el servicio de la deuda que podría, por lo que no podía permitirse el lujo endeudarse más. A lo largo de casi medio siglo, el país había estado cojeando.
El personal del FMI debe haber hecho un análisis similar, pero su junta designada por Estados Unidos invalidó a su personal económico interno. Es como si operaran desde un subsótano en el Pentágono e hicieran lo que les dicen. Entonces, el FMI prestó el dinero para apoyar a la oligarquía y su fuga de capitales. Esto fue básicamente lo que también hicieron los Estados Unidos/FMI en Rusia.
Cuando Argentina emitió bonos en dólares extranjeros, firmó un acuerdo cuyo lenguaje era ambiguo, diciendo que debía tratar a todos con paridad. Como saben, mi libro “Killing the Host” (asesinando al anfitrión) tiene un capítulo sobre la deuda externa de Argentina. La gran mayoría de los tenedores de bonos acordaron anotar esta deuda en una cantidad que, de manera realista, podría pagarse. Pero hace unos años un juez estadounidense casi senil falló a favor de los fondos de cobertura, diciendo que “paridad” significaba el pago total, no sujeto a la amortización acordada. El juez Griesa dijo que una deuda es una deuda, a pesar de que la mayoría de los argentinos la habían suscripto. Entonces los fondos buitres se limpiaron.
El resultado hoy es que Argentina está tan atada como Puerto Rico, Grecia o Ucrania. No es posible que pague sus deudas externas, por lo que los tenedores de bonos están abandonando sus bonos y la moneda se está hundiendo. La razón no es porque esté importando más, y ciertamente no porque sus salarios sean altos. Son muy bajos porque, como dije, el estado policial asesinó a los principales líderes sindicales.
El FMI fija los términos de sus préstamos: no se puede dar poder a los sindicatos, y tú tienes que privatizar tu industria (es decir, venderla a los inversores estadounidenses y extranjeros). Tú tienes que poner nuevamente la guerra de clases en los negocios con una venganza. Así es como llegamos a la situación en la que el FMI prestó suficiente dinero para que cualquier familia rica de Argentina pueda convertir sus pesos en dólares. Este vuelo de capital deja a la economía vacía y atada. Esa es la filosofía del “mercado libre” del FMI.
La situación empeorará en los próximos meses, no solo para Argentina, sino también para otros países de América Latina. El principal problema es que en los Estados Unidos la Reserva Federal está subiendo las tasas de interés. Está preocupada de que haya pleno empleo, y su trabajo es mantener bajos los salarios. La Fed piensa que la forma de reducir los salarios en los Estados Unidos es elevar las tasas de interés para disuadir nuevas inversiones y empleos, excepto a salarios mínimos o tarifas “de concierto” (es una forma de decir caras, porque la forma más cara de disfrutar de un espectáculo es pagando para verlo en vivo. Nota del Traductor).
El aumento de las tasas de interés para la economía de los EEUU significa que la tasa de cambio del dólar aumentará frente a monedas extranjeras. Se necesitarán muchos más pesos u otras monedas del Tercer Mundo para pagar su deuda en dólares. Eso significa que los países extranjeros de repente van a deber más por su deuda en moneda extranjera. Esa es otra razón por la cual el capital privado se está trasladando de Europa, América Latina y Asia, al dólar. Los inversionistas pueden ganar más dinero de forma segura comprando bonos del gobierno de EEUU que de otra manera, porque el sistema financiero internacional se ve muy inestable en este momento.
Es por eso que tenemos una curva de rendimiento invertida en los Estados Unidos: las tasas a corto plazo son más altas que a largo plazo, porque los “ahorradores” (alias el uno por ciento aquí y en el extranjero) están estacionando su dinero en pagarés líquidos del Tesoro de EEUU.
Si la Reserva Federal sigue adelante con su política de subir las tasas de interés, esto forzará defaults de parte de los países que adeudan sus deudas externas en dólares, porque la moneda fuerte es cada vez más cara en comparación con la moneda débil de los países deudores.


Paul Sliker: Como mencionaste antes, es sorprendente que para el FMI el término “nunca más otra Argentina” se convirtiera en su lema hace muchos años, y fuera citado en la vida real por los economistas de la Mesa Europea que se retiraron cuando el FMI hizo su horrible préstamo a Grecia. El FMI reconocía que la deuda de Argentina no era pagadera. Entonces, para ser un poco más claro acerca de lo que usted piensa que va a suceder esta vez con este masivo acuerdo de 50 mil millones de dólares… ¿simplemente va a rescatar a los especuladores en bonos argentinos?

Michael Hudson: no sólo los especuladores, sino también a la oligarquía doméstica de bonistas, terratenientes y propietarios corporativos. Los argentinos ricos que tratan con bancos extranjeros quieren mantener su dinero en el exterior, en monedas distintas del peso. Se dan cuenta de que el juego ha terminado y que es hora de tomar el dinero y correr.

Paul Sliker: Justamente, para ser realmente claro aquí en comparación con la situación del 2001-2002 ¿cómo va a impactar esto específicamente para el pueblo argentino en general, esta vez?

Michael Hudson: Lo mismo que como impactó al pueblo griego y al puertorriqueño. Muchos intentarán emigrar. Algunos se suicidarán. La expectativa de vida se acortará.
El escenario estándar es lo que le sucedió a Rusia bajo el neoliberalismo en la década de 1990. Es poco lo que los argentinos pueden hacer porque el presidente esencialmente trabaja para el sistema de banca comercial de Estados Unidos y ha dejado que el FMI meta presión a la Argentina. Ha detenido los subsidios internos para los combustibles y para el precio del petróleo y el gas a los productores nacionales. Básicamente está quitando los subsidios sociales en general. Es un programa de austeridad neoliberal clásico.
Argentina está siguiendo el programa de Donald Trump de equilibrar el presupuesto recortando sus programas sociales. Entonces, la razón por la cual Argentina debería ser interesante para tu audiencia es que parece ser el futuro de los Estados Unidos. Lo que le está sucediendo a Argentina es lo que Donald Trump -y antes que él, el presidente Obama- quiere hacer con la economía de los EEUU.


Paul Sliker: Esa es la pregunta que iba a hacerte. Mientras cerramos esta conversación, Miguel, tal vez puedas ampliar eso. Creo que algunas personas en general saben que el tema central de América Latina durante décadas es que la política económica y exterior de EEUU despliega al FMI y al Banco Mundial para apoyar a los acreedores, la inversión extranjera y la privatización. Pero, ¿por qué exactamente debería interesar a las personas aquí en los EEUU? Sé que comenzaste a explicar eso. Pero ahonda un poco más para nosotros allí.

Michael Hudson: Lo que realmente está en cuestión es si todas las deudas deben pagarse o no. Creo que debería existir una norma internacional según la cual ningún país debería estar obligado a pagar sus deudas con el rico Uno Por Ciento, especialmente a una clase de acreedores que prefiere mantener su riqueza doméstica en offshore, en monedas extranjeras. Ningún país debería estar obligado a pagar a sus tenedores de bonos si el precio de pagar significa austeridad, desempleo, disminución de la población, emigración, aumento de las tasas de suicidio, abolición de las normas de salud pública y venta de lo que es de dominio público a los monopolistas. Para hacer las cosas aún peores, las privatizaciones demandadas por el FMI y el Banco Mundial, por ejemplo, aumentarán drásticamente los precios de servicios públicos, transporte, agua y barrido y limpieza, comunicaciones y teléfonos.
Debería haber un principio de que los nacionales deberían antes que los extranjeros. Pero el principio rector del FMI, el Banco Mundial y los Estados Unidos es lo opuesto: a saber, que ninguna nación debe anteponer sus propios intereses. En su lugar, cada nación es empujada a poner en primer lugar los intereses de los acreedores internacionales, incluso cuando el costo es empobrecimiento, dependencia, pobreza masiva y desindustrialización. Esto es lo que la globalización realmente significa hoy. Esta es una imposición internacional de guerra de clases por parte del acreedor Uno Por Ciento contra los trabajadores y el endeudado 99 % y sus gobiernos.
La locura de esto fue explicada hace más de 2000 años. En el Libro I de la República, de Platón, tú tienes a Sócrates argumentando en contra de la idea de que todas las deudas se paguen. Él pregunta, ¿y si le pides prestado un arma a un loco y él te pide que se la devuelvas? ¿Deberías darle un arma si es probable que lastime a la gente?
Esto se aplica a los acreedores en general: ¿deberían pagar las deudas si los acreedores van a usar vuestro dinero para empobrecer a la sociedad y reducir a las personas a la dependencia de la deuda? De eso se trata la República. Todavía estamos tratanto hoy, veinticuatro siglos después, con el mismo problema.
La cuestión es: ¿qué debería venir primero: el bienestar del pueblo o el de los acreedores?

 
Paul Sliker: Todo el mundo podrá aprender pronto sobre la historia de la deuda y civilizaciones económicas antiguas en el próximo libro de Miguel cuyo lanzamiento está previsto para fines de este verano. El libro se llama “… y perdónales sus deudas: préstamos, ejecuciones hipotecarias y rescates, desde las finanzas de la Edad del Bronce hasta el año jubilar”.
Quiero que todos sepan que lamentamos no haber podido continuar nuestros episodios semanales de “The Hudson Report”. Miguel ha estado muy ocupado preparando todo junto con el libro que acabo de mencionar, y acaba de regresar de un viaje a Europa. Ahora que ha vuelto, podemos volver a nuestro horario semanal habitual. Pero por ahora, como siempre Miguel, gracias por acompañarme en el “Informe Hudson”.

Michael Hudson: Siempre es bueno estar aquí, Paul.

EL GOLPE EN MARCHA PARA DERROCAR AL PRESIDENTE TRUMP: SEDICIÓN EN LOS MÁS ALTOS NIVELES

por Paul Craig Roberts. En Instituto para la Economía Política. En Comunidad Saker Latinoamérica. Traducción de Leonardo Del Grosso, de Comunidad Saker Latinoamérica

 

La histeria antirrusa en la "presstitute" estadounidense

El presupuesto anual del complejo militar/de seguridad es de 1 millón de millones de dólares. Esta gran suma proviene de los contribuyentes estadounidenses que tienen muchas necesidades insatisfechas. Para justificar un presupuesto tan enorme se requiere un gran enemigo. El complejo militar/de seguridad y los medios de comunicación y políticos que posee el complejo han designado a Rusia como ese enemigo. El complejo y sus agentes políticos y mediáticos no le permitirán a Trump normalizar las relaciones con Rusia.
Para evitar que el presidente Trump reduzca las peligrosas tensiones que, entre potencias nucleares, Washington ha creado, el complejo militar/de seguridad orquestó el “Russiagate”, un engaño comprobado, pero que muchos creen debido a su interminable y repetida difusión. El complejo militar/de seguridad orquestó las acusaciones falsas de 12 rusos. El complejo militar/de seguridad orquestó el arresto falso de Maria Butina (https://www.nytimes.com/2018/07/18/us/politics/maria-butina-russia-espionage.html), y así sucesivamente.
El complejo militar/de seguridad, que actúa a través de los políticos y la prensa prostituta, a los que posee y controla, ha convertido la responsabilidad cotidiana normal del presidente para desactivar las tensiones que podrían conducir a una guerra nuclear (responsabilidad reconocida y ejercida por cada presidente anterior), en un alto crimen. ¡El presidente Trump es acusado de traición por tratar de hacer las paces!
Una persona inconsciente podría pensar que esto es una tontería y reírse, pero como Finian Cunningham muestra (http://thesaker.is/coming-coup-against-trump/) , el presidente Trump ha sido establecido como un enemigo traidor a Estados Unidos. Actualmente estamos experimentando sedición en los niveles más altos a medida que el complejo militar/de seguridad despliega su golpe contra el presidente electo de los Estados Unidos.
En 1961, el presidente Dwight Eisenhower advirtió a los estadounidenses, en su último discurso público, que el complejo militar/industrial era una amenaza para la democracia estadounidense. Palabras más verdaderas nunca fueron dichas por un presidente estadounidense. Poco después, el complejo militar/de seguridad asesinó al presidente John F. Kennedy por trabajar por la paz con el líder soviético Khrushchev. Para deshacerse del presidente Nixon, que hizo demasiados acuerdos de control de armas con los soviéticos y se abrió a China, el complejo militar/de seguridad utilizó su activo, el Washington Post, para orquestar la “crisis de Watergate”, que el complejo militar/de seguridad usó para forzar la renuncia de Nixon. Ahora el complejo militar/de seguridad está incitando abiertamente a la sedición contra el Presidente de los Estados Unidos. Si este complot tiene éxito, que es lo más probable, Estados Unidos será una distopía completa y todas las voces independientes se censurarán.


¿En quién puede confiar Trump? No en su propio partido político. No en su propio gobierno. No en la prensa escrita y la TV o NPR (National Public Radio). No en Europa. No en el servicio secreto. No en el Pentágono. No en el inconsciente pueblo estadounidense. Trump solo tiene los “deplorables”, y no están organizados, y experimentarán represalias una vez que Trump sea removido.
Al esforzarse por llegar a un acuerdo con Washington, Putin y Lavrov están golpeando sus cabezas contra un muro de piedra. Tarde o temprano, Putin y Lavrov tendrán que reconocerlo. Una vez que Putin y Lavrov se den cuenta de la verdadera situación, comprenderán que la guerra o la rendición es su única opción.

DE LA OTAN EN COLOMBIA AL TRÁFICO DE NIÑOS: ESTADOS UNIDOS SE HA CONVERTIDO EN SINÓNIMO DE CRUELDAD

(Lo que sigue es una traducción publicada el pasado 3 de junio, cuando la tragedia de los inmigrantes mexicanos hacia Estados Unidos llegó al paroxismo de la crueldad, y cuando aún desde Colombia no habían intentado asesinar a Nicolás Maduro. Por falta de tiempo no había colgado antes este post en mi blog).


por Paul Craig Roberts, en Instituto para la Economía Política. En Comunidad Saker Latinoamérica. Traducción de Comunidad Saker Latinoamérica 

 

Colombia, Estado vasallo del Imperio Anglosionista

El Departamento de Justicia de los EEUU (Sic) ha adoptado una política de confiscación de niños inmigrantes y separación de sus padres. Los niños son enviados a “hogares de crianza”. The Intercept informa que “el Departamento de Salud y Servicios Humanos le dijo al Congreso que la agencia había perdido el rastro de 1.475 niños migrantes no acompañados que había colocado con patrocinadores”. No hay duda de que los niños se han vendido a los anillos de pedófilos que sirven a la escoria corrupta que gobierna Estados Unidos de América.
Los estadounidenses se esconden de la verdad detrás de la historia de que los inmigrantes ilegales vienen a los EEUU para vivir de la asistencia social y cometer crímenes. Hay pocas dudas de que algunos lo hacen. Sin embargo, el principal motor de la inmigración desde América Latina es la negativa de larga data de Washington a permitir cualquier gobierno latinoamericano que sirva a su pueblo en lugar de los negocios y los intereses de la política exterior de los Estados Unidos. Cada vez que una población elige a un líder que la representará a ella en lugar de a los intereses estadounidenses, como Hugo Chávez y su sucesor Maduro, Washington los demoniza y los derroca. Hasta el momento Venezuela se ha mantenido más tiempo que otros a pesar del caos económico que Washington ha infligido al país. Hay evidencia que sugiere que Washington va a usar su estado títere, Colombia, para atacar a Venezuela. Washington ha reforzado a Colombia mediante agregar a Colombia a la OTAN, comprometiendo así también a toda Europa en el apoyo a Colombia cuando Washington orqueste un evento de bandera falsa que se utilizará para comenzar la guerra. ¿Qué otra razón hay para poner a Colombia en la OTAN, la Organización del Tratado del Atlántico Norte que está lejos de Sudamérica? https://www.reuters.com/article/us-colombia-nato/colombia-to-be-natos-first-latin-american-global-partner-idUSKCN1IR0E8
https://theintercept.com/2018/05/29/zero-tolerance-border-policy-immigration-mass-trials-children/?utm_source=The+Intercept+Newsletter&utm_campaign=a65ac5275c-EMAIL_CAMPAIGN_2018_06_02&utm_medium=email&utm_term=0_e00a5122d3-a65ac5275c-131966649