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miércoles, 29 de marzo de 2017

"QUE NO TE HUNDAN EL BARCO". CARTA DE UN ARGENTINO A LOS ECUATORIANOS


publicado en HispanTV



Como es sabido, el 2 de abril se hará la segunda vuelta de la elección presidencial en Ecuador. Nosotros en Argentina tuvimos una situación similar hace casi un año y medio. Quiero suponer que es una suerte poder ver el futuro con anticipación. Cualquier ecuatoriano responsable prestará atención a lo que sucede hoy en la Argentina, porque la disyuntiva que enfrenta Ecuador este 2 de abril se parece mucho a la que enfrentó Argentina el 22 de noviembre de 2015. Advierto que esta carta no está dirigida a los que están estupidizados por el fanatismo. Esta carta es para los que hacen uso del raciocinio y entienden que para tomar buenas decisiones lo primero es estar bien informado.

Por eso, sin ninguna duda que para los ecuatorianos responsables será importante conocer lo que sucede hoy en Argentina, a casi 16 meses desde que Macri asumió la presidencia. Si los argentinos hubieran visto esta película antes de las elecciones, Macri no habría ganado. Y de hecho, en junio del año pasado Macri decía: “Soy realmente muy optimista. Si yo les decía a ustedes hace un año lo que iba a hacer y todo esto que está sucediendo, seguramente iban a votar mayoritariamente por encerrarme en el manicomio. Y ahora soy el Presidente” (http://www.cronista.com/economiapolitica/Macri-Si-les-decia-todo-lo-que-iba-a-hacer-votaban-por-encerrarme-en-el-manicomio-20160629-0123.html). Debe reconocerse que, esta vez, el mandatario argentino dijo la verdad.


 
Nov 2015: Debate Scioli-Mari (compará con el presente y sacá tus propias conclusiones)


¿Qué pasa hoy en Argentina? (recurra a los links si le parece que exagero)
Hoy en Argentina pasa que la economía se está enfriando y retrocede; que aumenta ladesocupación, la indigencia y la pobreza; que los ricos pagan cada vez menos impuestos y los pobres, cada vez más; que hay una inflación que no cede y, por el contrario, se acelera alimentada por aumentos exorbitantes de servicios públicos y precios desregulados; que ha crecido sideralmente el endeudamiento externo e interno; que se han abierto indiscriminadamente las importaciones, destruyéndose así la industria nacional; que la obra pública está congelada; que se atenta contra la salud pública, la educación pública, la vivienda popular, jubilación y seguridad social en general; que el gobierno hace todo para bajar los salarios de los trabajadores; que la tasa de interés es altísima, lo que alienta la especulación y desalienta la inversión productiva; que cada vez más ingresos fiscales se dedican a pagar a la usura nacional e internacional y cada vez menos vuelven, como inversión productiva, investigación, salarios o seguridad social, al bolsillo del pueblo; que se está entregando el territorio nacional a otros países, como Gran Bretaña en el caso de nuestras Islas Malvinas; y que los episodios de represión contra el pueblo son cada día más frecuentes.
Hoy en Argentina pasa que hay un presidente que durante la campaña se llenó la boca hablando contra la corrupción al mismo tiempo que está involucrado en decenas de sociedades off-shore, de empresas fantasma para ocultar fuga de capitales y evasión de impuestos. Hoy en Argentina pasa que hay un presidente que criticaba un presunto “capitalismo de amigos” al mismo tiempo que el presupuesto del Estado está dirigido a beneficiar a los banqueros y a los CEOs que fungen como funcionarios del Estado, que se están enriqueciendo de manera escandalosa. Hoy en Argentina pasa que estas realidades son silenciadas por la conspiración de medios de comunicación antinacionales, a la vez que magistrados afines al actual presidente pergeñan y ejecutan fraudes jurídicos para montar, en sincronizazión con la prensa canalla, un relato sensacionalista que exagera y sobredimensiona los hechos si ocurrieron, o directamente inventa y fabula si los hechos no existieron, todo para difamar a los enemigos políticos, haciendo periodismo de guerra.

La “pesada herencia”
El gobierno de Macri dice que todo lo que pasa es resultado de una bomba de relojería que dejó armada el anterior gobierno para que explotara ahora. O sea: todo este descalabro es por culpa del anterior gobierno y, según Macri, lleva tiempo poder revertir el “desastre” que encontraron.
Con sólo investigar un poco nos daremos cuenta que todo eso es mentira. Lo que los macristas llaman la “pesada herencia” no es más que una construcción virtual, una maniobra comunicacional para encubrir que en realidad no hubo ninguna herencia difícil a la que sobreponerse, sino que el plan de Macri es, deliberadamente, convertir a la Argentina en una colonia, reduciendo todo lo posible el valor de lo argentino (se trate ésto de la fuerza de trabajo, los bienes de capital e infraestructura o los recursos naturales) para que el país pueda ser fácilmente apropiado por los poderes extranjeros con los que Macri y las oligarquías parasitarias se encuentran íntimamente unidos.
Es cierto que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner no fue infalible y que había mucho por avanzar para lograr un país con verdadera justicia social, pero también es cierto que no por eso se trató de un gobierno aborrecible al que resultaba necesario cambiar a cualquier precio. Por el contrario, fue un gobierno de protección de la industria y de promoción del mercado interno, de controles a los monopolios y fomento de la intervención reguladora, promotora y reparadora del Estado, de aumento de la inversión pública en todos los órdenes y de arbitrio relativamente razonable para lo que es el mundo de hoy entre los intereses del lucro capitalista y los derechos de los trabajadores; todo lo cual redundó en una tendencia general positiva, de indudable avance nacional, donde aumentó la producción, subió sensiblemente el empleo y el poder adquisitivo de los salarios y se produjo un evidente desendeudamento externo en relación con el producto interno. En el plano internacional fue un gobierno que promovió relaciones con todos los países y especialmente con Latinoamérica, hacia un mundo multipolar que tienda al equilibrio entre las naciones.
Esto que estoy describiendo es una realidad tangible, demostrable con sólo repasar lo publicado y con sólo rememorar lo vivido. Pero la “prensa canalla” sencillamente ignora los hechos, ignora la Historia, y despliega un relato que pretende “reformatear” el sentido político de las percepciones. Es lo mismo que sucede con las drogas: a una persona narcotizada con drogas potentes es posible amputarle una pierna exactamenter en el mismo momento en que su psiquis está adormecida o, más aún, experimentando sensaciones alucinadas agradables. Hoy en Argentina hay muchas personas que, alimentadas monopólica y repetitivamente por un relato fantástico, sostienen con énfasis los “argumentos” sobre la “pesada herencia”.
En este video de la intervención del 21 de marzo pasado del diputado y ex ministro de Economía de la Nación, Axel Kicillof, al Jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, en la Cámara de Diputados, Kicillof destaca varios datos estadísticos oficiales que prueban la mentira del relato macrista:


Transcribo totalmente la alocución de Axel Kicillof porque entiendo que es muy clara al respecto (los resaltados son míos):
Señor jefe de gabinete, la verdad es que se han conocido en estos últimos días, ayer más precisamente, los datos del producto bruto interno, o sea, la evolución de la economía argentina en lo que hace a producción y valor agregado del último año. Usted sabe que hubo una caída de 2,3% según los datos que estamos estudiando que proporcionó el INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, que es el organismo oficial de estadísticas en Argentina. Aclaración L.D.G.), pero lo que le quiero decir es que la proyección que dio su gobierno para el año pasado fue de 1% de crecimiento, es decir que le han pifiado de punta a punta, y además esto viene acompañado con algo que Usted repite pero es falso, que es que veníamos sin crecer no se cuantos años. Concretamente el año 2015, datos de la misma fuente, el crecimiento fue 2,6% positivo, de forma tal que lo que lograron ustedes es revertir un proceso de crecimiento y convertirlo en un proceso de caída sin saber porqué ni cómo, por eso habían proyectado un crecimiento de la economía, así como habían proyectado una inflación de 20-25 y les dio 41%, es decir que el año pasado gobernaron a ciegas. Sinceramente: o se equivocaron en todo o hicieron todo mal o no sabían o no entendieron, no sé, y esa es una pregunta que le hago, porque además los datos del INDEC dan una revelación muy clara, a Usted que le gusta hablar de herencias y herencias: la verdad es que ustedes abrieron las importaciones. Fue la primera vez desde el año 1975 que cae el producto bruto interno, o sea, cae la actividad, y suben las importaciones. Hay que hacer magia para eso. Hay que hacer magia en la economía: todos saben que las importaciones dependen del producto pero ustedes lograron hacer caer la actividad y aumentar las importaciones. Por eso hay crisis en buena parte de la industria, de la misma manera que es mentira que en los últimos cinco años antes de que llegaran ustedes no se crea empleo: la verdad es que ustedes han destruído mucho empleo, todavía no el suficiente para destruir lo que se creó durante los cinco años anteriores. Le doy datos del SIPA (Sistema Integrado Previsional Argentino, donde se registran, entre otros, los aportes que los asalariados hacen a la seguridad social, por lo que se toma también como registro de cuántos asalariados existen en condiciones de legalidad normal, “en blanco”, como se suele decir. Aclaración mía), que son datos oficiales, y que muestran que el empleo desestacionalizado entre noviembre de 2015 a noviembre de 2016, es decir su año, fueron cuarenta mil puestos de trabajo menos, mientras de noviembre de 2014 a noviembre de 2015 fueron 117 mil aportantes más, sin monotributistas, sin ninguna matufia, aportantes más, de la misma manera que desde noviembre de 2010 a noviembre de 2015 se crearon 500 mil puestos de trabajo, 448 mil formales. ¡Mentira: basta de decir que no se creaba empleo! Que lo hayan destruído ustedes, eso es clarísimo, pero no se justifica que tengan que mentirle a la gente. ¡Digan la verdad! ¡Digan la verdad!
¿Y por qué? Este es un programa económico neoliberal, en todos sus puntos. Mi pregunta es qué van a hacer para cambiarlo si quieren tener otro resultados: devaluaron 60%, la inflación fue 40% y el salario estuvo 10 puntos abajo, 6 en algunos lugares, 15 en otros. ¿Cómo quieren que no caiga el consumo? Claro que va a caer el consumo. ¿Cómo quieren no tener un millón de personas en la calle, el 6, 7, 8 de este mes? ¿Cómo quieren no tener hoy cien mil docentes en la calle si les robaron 10 puntos de salario y no se los quieren dejar recuperar? Esa es la paritaria docente, eso es lo único que está en discusión hoy en la Argentina: si van a seguir golpeando a los sectores que menos ganan, con aumentos de tarifas del transporte del 100%, de agua del 300, de luz del 1000%, de prepagas del 60%, de nafta del 42%, tasa de interés del 38%, que después bajaron al 24%. La verdad que ese no es un plan ni para la gente ni para la reactivación. Yo lamentablemente tengo que decir que hay frases que están sintetizando esto. Una de ellas es que ustedes no ven la realidad. Usted no ve la realidad. Usted no ve la realidad: no ve los cien mil docentes que va a haber hoy en la calle, de la misma manera que otra frase que se le atribuye al saber popular pero que es clarísima y que excede todo análisis económico, es que gobiernan para los ricos, por eso le perdonan impuestos a los ricos y se los suben a los pobres. Esa es la realidad hoy de la Argentina así que yo creo, señor jefe de gabinete, que le convendría, porque he visto de nuevo una instalación… yo no se si las cincuenta personas que están ahí afuera son los trolls, los famosos trolls, pero eso, sean o no sean, lo que le digo que más allá de las cincuenta personas que usted trajo, ahí atrás hay cien mil, que están reclamando que abran la paritaria docente. Esa es la realidad; no lo de las redes, no lo de los trolls, no los asesores que trae acá. Muchas Gracias”.

La deuda externa
Un usurero no pretende que el deudor pague y cancele la totalidad de la deuda. Pretende que el deudor viva endeudado, pagando eternamente una deuda que siempre crecerá más que la capacidad del deudor de reducirla y cancelarla. Por eso es usura, porque es como un parásito infiltrado dentro de un organismo al que le chupa la sangre eternamente. Los medios para lograr esta parasitosis constante son las exhorbitantes tasas de interés, que hacen imposible ir reduciendo la deuda, aún esforzándose al máximo para ello. Esto se llama anatocismo, interés compuesto, donde los intereses impagos pasan a formar parte del capital y generan nuevos intereses en una rueda perversa interminable que sólo se interrumpe con un default, momento en el cual el deudor, desahuciado, deja de pagar.
Para poder lograr sus fines el usurero necesita socios que sean del país que se pretende endeudar, es decir, antipatrias que actúen como representantes jurídicos de la Argentina pero traicionen, a cambio de su participación en el botín, los intereses del país. Macri obtuvo la representación de la Argentina a partir de haber ganado las elecciones, pero indudablemente no está defendiendo el interés nacional sino actuando como siempre lo hizo: en contra. Un fugador de capitales y evasor de impuestos mal puede tener conciencia nacional. Toda su vida es un testimonio de la estafa al Estado y la Nación.
Cuando fue el default del 2001, en un país con generalizados y graves disturbios sociales, la Argentina tenía la opción de nunca volver a pagar por una deuda indudablemente ilegítima e ilegal (¿cómo pueden ser legales los actos de una banda de sediciosos como los golpistas de 1976, que en seis años incrementaron el endeudamiento externo de Argentina en el 1000%, lo que fue luego validado por los presidentes surgidos de elecciones?).
Cuando la Argentina entró en default en el año 2001, eso significó que el esquema de retroalimentación de la deuda externa había entrado en crisis en sus propios términos, interrumpiéndose. En aquellos años del pos-default, y desde siempre, yo personalmente nunca estuve de acuerdo en pagar la deuda externa, y esa posición me llevó a oponerme a la estrategia de renegociar, razón por la cual fui un crítico a los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner durante sus primeros diez años de mandato. En cualquier caso, la larga resistencia popular de la década del ‘90 del siglo pasado generó una relación de fuerzas que le permitió a Néstor Kirchner renegociar la deuda impaga en los mejores términos posibles (siempre sin transgredir las leoninas reglas de juego imperantes a nivel internacional). Lo concreto es que la Argentina redujo objetivamente la relación entre el producto bruto y la deuda externa, fenómeno que se explica por el crecimiento de la capacidad productiva y el pago de los intereses y capital de la deuda renegociada. Por un lado se fue incrementando el poder productivo nacional y por otro se fue reduciendo la proporción de deuda externa en relación con el producto. Junto con Cristina Fernández de Kirchner deshipotecaron la Argentina, conquistando una apreciable soberanía nacional sobre la conducción de la economía del país. En términos metafóricos, lo que ocurrió fue casi una manumisión…, casi…,  si no fuera porque llegó Macri.
Es cierto que la deuda del Estado con sus acreedores internos, nominada en pesos argentinos, en esos tiempos kirchneristas de todas maneras bien hubiera podido caracterizarse dentro de una lógica usuraria, pero en este campo de batalla ubicado estrictamente dentro de las fronteras del país (en caso de litigio, el mismo se desenvuelve dentro de Argentina, en sus tribunales) un Estado nacional conducido por una voluntad política firme y verdaderamente democrática podría ir cambiando las condiciones generales del crédito interno (que es lo que la conducción económica de Axel Kicillof estaba comenzando a cambiar) y siempre tendría el poder suficiente para renegociar, periódicamente, los términos de la relación financiera sin sacrificar los derechos fundamentales del pueblo, en lo que constituye, indudablemente, una proposición de resolución reformista de la crisis.
En plano internacional Argentina había logrado, además de la adhesión del 92,4% de los acreedores al canje de los bonos defaulteados, el apoyo de 128 sobre 193 miembros de las Naciones Unidas (casi dos tercios) contra la oposición de sólo 16 estados (los demás se abstuvieron) cuando se aprobó la creación de un marco legal multilateral de reestructuración de deudas soberanas. O sea que en 2014 Argentina tenía un gran apoyo internacional para enfrentar al 7,6% de los acreedores hostiles que pretendían seguir cobrando la deuda en mismos términos usurarios sumamente abusivos originales, porque habían comprado los viejos bonos en default a precio de liquidación, justamente para hacer la maniobra, con socios como el juez municipal de Nueva York, Tomás Griesa, de cobrar, gracias a la sentencia del juez “amigo”, el total de la deuda, como si el default nunca hubiera existido.
Al final del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner la manumisión estaba al alcance de la mano: la libertad no se había conseguido a través de una revolución y de una guerra de liberación nacional, sino mediante un precio en especie a pagar para obtenerla. Para muchos puede resultar una forma ingloriosa de salir de la esclavitud, pero más allá de consideraciones políticas de ese tenor, lo que no cabe duda es que Argentina estaba cerca de comprar, efectivamente, su libertad, la que los amos estaban dispuestos a concederle porque había pagado. Esto es decir: sin dejar de cumplir determinadas reglas de juego, la Argentina había construído una situación favorable en ese sentido… Pero justo llegó Macri.
Los usureros lograron, con la victoria de este curioso sacerdote del neoliberalismo que es Macri, que esa libertad que estaba relativamente cerca, nuevamente se escurriera como agua entre las manos pero… ¡después de haber pagado por ella!!! Resultó un negocio redondo para los fondos buitres y una humillación absoluta a la pretendida “viveza criolla” de los argentinos: para el mundo no hay un ejemplo de país más estúpido que el que hace como aquél esclavo que paga por su libertad y luego, con la puerta de la celda abierta, rehusa salir del encierro. Por supuesto, esta triste realidad de Argentina no es gracias a los que votaron a Scioli, sino precisamente gracias a los burgueses, pequeño-burgueses o directamente desclasados (sin dudas que me refiero a lo subjetivo, porque por sus ingresos, los desclasados seguramente hoy, con Macri, están sumergiéndose aún más en la pauperización, como nuevos subocupados, desocupados o mendigos) que, por su crasa y grosera ignorancia política, por su fanatismo gorila, por su egocentrismo demagógicamente alimentado por las maniobras comunicacionales del imperio, votaron a Macri o se abstuvieron en la segunda vuelta, permitiendo así el ascenso de un vendepatria al poder.

Responsabilidad política
Si las decisiones electorales de los ciudadanos tuvieran consecuencias sólo individuales, ahora los que votaron a Macri y fueron engañados (o no) deberían, si tuvieran algo de coherencia, estar contentos mientras les reducen el poder adquisitivo de sus salarios, mientras aumentan sideralmente los servicios, o mientras los dejan sin trabajo. Se lo merecerían por irresponsables políticos, por perezosos mentales o por idiotas manipulables; no importa la etiqueta. El problema es que, desgraciadamente, este mundo sigue siendo muy injusto y entonces, por (i)responsabilidad de los que votaron a Macri, hoy las calamidades no las sufren sólo los macristas, sino que las sufren, y más aún, por una cuestión de extracción social más humilde, los que en su mayoría votaron a Scioli (aunque lo hayan hecho así sea como único medio -el voto en blanco constituyó un testimonialismo soberbio, por inconducente- para evitar el ascenso del vendepatria).
Es en este punto donde yo, como argentino, interpelo a cada ecuatoriano a que no sea un estúpido, a que razone, a que no se deje manipular por los peores, y sepa discriminar lo personal de lo político, y sepa separar las características peculiares de cada actor político (que inevitablemente tendrá defectos, y en muchos casos imperdonables), de la correcta dirección general del país. Y para poder hacer esa diferenciación es necesario poder crítico, información, determinación intelectual, curiosidad política, realismo.
Hoy en Ecuador hay dos opciones: ni cinco, ni cuatro, ni tres, ni diez… dos. Y en este punto yo prefiero, para viajar en un barco, elegir un capitán difamado y vilipendiado pero capaz de evitar que el buque se hunda, a viajar con un capitán del que los malintencionados hablan muy bien pero que no trabajará, sin ninguna duda, para evitar que la nave se vaya a pique sino que, justamente, será el conductor que hundirá el barco a propósito para poder, con los piratas, saquear sus tesoros. Eso es lo que Macri hoy está haciendo.
Por eso, para cada vez más argentinos el agua está muy helada, letalmente helada y, como pasó en el Titanic, sólo hay barcos salvavidas para los oligarcas que, además, se están quedando con el botín que le roban a los náufragos. Fue un 22 de noviembre de 2015 que la gloriosa Argentina, por decisión de la mayoría de sus pasajeros, principalmente de los que viajan en primera y segunda clase, se dirigió rauda contra el témpano y su casco fue desgarrado, comenzando a hacer agua de manera alarmante.
A los argentinos nos queda la esperanza de que los sobrevientes reconstruirán, quizá desde una isla desierta, el barco con el que naveguemos una vez más, y con más convicción y ahínco, hacia nuestros sueños.
Vos, ecuatoriano, tenés la suerte de poder ver la película antes de tomar tus decisiones. Yo te digo que no seas tonto: no te dejes “enlassar” como vaca boba; no elijas al Macri de Ecuador, que se llama Guillermo Alberto Santiago Lasso Mendoza. ¡Pensá!!!
Capaz que Lenín Moreno no sea el mejor capitán del mundo, capaz que sí, pero más allá de matices, todo es posible mientras el barco está a flote. Si hay naufragio, es que ya será tarde. Y Lasso es el naufragio de Ecuador. 
Ecuatoriano, te lo digo con la mejor intención: si no votás por Lenín Moreno, dentro de unos meses vos también vas a conocer, como los argentinos hoy, qué fría que se siente el agua helada.

Leonardo Del Grosso

martes, 28 de marzo de 2017

CARTA ABIERTA DE RODOLFO WALSH A LA JUNTA MILITAR

por Rodolfo Walsh, en el blog de Cristina Fernández de Kirchner


(Nota del Editor) Rodolfo Walsh nació en Choele Choel, Argentina, el 9 de enero de 1927. Desde el 25 de marzo de 1977 está desaparecido por la dictadura terrorista de 1976. Militante revolucionario de la Organización Montoneros, brillante escritor y periodista, su vida fue un compromiso creciente y ferviente con la causa patriótica revolucionaria. La Historia Argentina y de las luchas del Tercer Mundo contra el imperio angosionista está marcada definitivamente por el pensamiento y la acción de Rodolfo Walsh. A continuación la carta que enviara a la Junta Militar y a diversos medios de prensa nacionales e internacionales, un día antes de su desaparición, hace 40 años. Sus restos mortales nunca fueron recuperados. Su compromiso y su lucidez inspirarán eternamente a las nuevas generaciones de patriotas revolucionarios.




1- La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años.
El primer aniversario de esta Junta Militar ha motivado un balance de la acción de gobierno en documentos y discursos oficiales, donde lo que ustedes llaman aciertos son errores, los que reconocen como errores son crímenes y lo que omiten son calamidades.
El 24 de marzo de 1976 derrocaron ustedes a un gobierno del que formaban parte, a cuyo desprestigio contribuyeron como ejecutores de su política represiva, y cuyo término estaba señalado por elecciones convocadas para nueve meses más tarde. En esa perspectiva lo que ustedes liquidaron no fue el mandato transitorio de Isabel Martínez sino la posibilidad de un proceso democrático donde el pueblo remediara males que ustedes continuaron y agravaron.
Ilegítimo en su origen, el gobierno que ustedes ejercen pudo legitimarse en los hechos recuperando el programa en que coincidieron en las elecciones de 1973 el ochenta por ciento de los argentinos y que sigue en pie como expresión objetiva de la voluntad del pueblo, único significado posible de ese “ser nacional” que ustedes invocan tan a menudo.
Invirtiendo ese camino han restaurado ustedes la corriente de ideas e intereses de minorías derrotadas que traban el desarrollo de las fuerzas productivas, explotan al pueblo y disgregan la Nación. Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando la prensa e implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad argentina.

2. Quince mil desaparecidos, diez mil presos, cuatro mil muertos, decenas de miles de desterrados son la cifra desnuda de ese terror.

Colmadas las cárceles ordinarias, crearon ustedes en las principales guarniciones del país virtuales campos de concentración donde no entra ningún juez, abogado, periodista, observador internacional. El secreto militar de los procedimientos, invocado como necesidad de la investigación, convierte a la mayoría de las detenciones en secuestros que permiten la tortura sin límite y el fusilamiento sin juicio.
Más de siete mil recursos de hábeas corpus han sido contestados negativamente este último año. En otros miles de casos de desaparición el recurso ni siquiera se ha presentado porque se conoce de antemano su inutilidad o porque no se encuentra abogado que ose presentarlo después que los cincuenta o sesenta que lo hacían fueron a su turno secuestrados.
De este modo han despojado ustedes a la tortura de su límite en el tiempo. Como el detenido no existe, no hay posibilidad de presentarlo al juez en diez días según manda una ley que fue respetada aun en las cumbres represivas de anteriores dictaduras.
La falta de límite en el tiempo ha sido complementada con la falta de límite en los métodos, retrocediendo a épocas en que se operó directamente sobre las articulaciones y las vísceras de las víctimas, ahora con auxiliares quirúrgicos y farmacológicos de que no dispusieron los antiguos verdugos. El potro, el torno, el despellejamiento en vida, la sierra de los inquisidores medievales reaparecen en los testimonios junto con la picana y el “submarino”, el soplete de las actualizaciones contemporáneas.
Mediante sucesivas concesiones al supuesto de que el fin de exterminar a la guerilla justifica todos los medios que usan, han llegado ustedes a la tortura absoluta, intemporal, metafísica en la medida que el fin original de obtener información se extravía en las mentes perturbadas que la administran para ceder al impulso de machacar la sustancia humana hasta quebrarla y hacerle perder la dignidad que perdió el verdugo, que ustedes mismos han perdido.

3. La negativa de esa Junta a publicar los nombres de los prisioneros es asimismo la cobertura de una sistemática ejecución de rehenes en lugares descampados y en horas de la madrugada con el pretexto de fraguados combates e imaginarias tentativas de fuga.

Extremistas que panfletean el campo, pintan acequias o se amontonan de a diez en vehículos que se incendian son los estereotipos de un libreto que no está hecho para ser creído sino para burlar la reacción internacional ante ejecuciones en regla mientras en lo interno se subraya el carácter de represalias desatadas en los mismos lugares y en fecha inmediata a las acciones guerrilleras.
Setenta fusilados tras la bomba en Seguridad Federal, 55 en respuesta a la voladura del Departamento de Policía de La Plata, 30 por el atentado en el Ministerio de Defensa, 40 en la Masacre del Año Nuevo que siguió a la muerte del coronel Castellanos, 19 tras la explosión que destruyó la comisaría de Ciudadela forman parte de 1.200 ejecuciones en 300 supuestos combates donde el oponente no tuvo heridos y las fuerzas a su mando no tuvieron muertos.
Depositarios de una culpa colectiva abolida en las normas civilizadas de justicia, incapaces de influir en la política que dicta los hechos por los cuales son represaliados, muchos de esos rehenes son delegados sindicales, intelectuales, familiares de guerrilleros, opositores no armados, simples sospechosos a los que se mata para equilibrar la balanza de las bajas según la doctrina extranjera de “cuenta-cadáveres” que usaron los SS en los países ocupados y los invasores en Vietnam.
El remate de guerrilleros heridos o capturados en combates reales es asimismo una evidencia que surge de los comunicados militares que en un año atribuyeron a la guerrilla 600 muertos y sólo 10 o 15 heridos, proporción desconocida en los más encarnizados conflictos. Esta impresión es confirmada por un muestreo periodístico de circulación clandestina que revela que entre el 18 de diciembre de 1976 y el 3 de febrero de 1977, en 40 acciones reales, las fuerzas legales tuvieron 23 muertos y 40 heridos, y la guerrilla 63 muertos.
Más de cien procesados han sido igualmente abatidos en tentativas de fuga cuyo relato oficial tampoco está destinado a que alguien lo crea sino a prevenir a la guerrilla y a los partidos de que aun los presos reconocidos son la reserva estratégica de las represalias de que disponen los Comandantes de Cuerpo según la marcha de los combates, la conveniencia didáctica o el humor del momento.
Así ha ganado sus laureles el general Benjamín Menéndez, jefe del Tercer Cuerpo de Ejército, antes del 24 de marzo con el asesinato de Marcos Osatinsky, detenido en Córdoba, después con la muerte de Hugo Vaca Narvaja y otros cincuenta prisioneros en variadas aplicaciones de la ley de fuga ejecutadas sin piedad y narradas sin pudor.
El asesinato de Dardo Cabo, detenido en abril de 1975, fusilado el 6 de enero de 1977 con otros siete prisioneros en jurisdicción del Primer Cuerpo de Ejército que manda el general Suárez Masson, revela que estos episodios no son desbordes de algunos centuriones alucinados sino la política misma que ustedes planifican en sus estados mayores, discuten en sus reuniones de gabinete, imponen como comandantes en jefe de las 3 Armas y aprueban como miembros de la Junta de Gobierno.

4. Entre mil quinientas y tres mil personas han sido masacradas en secreto después que ustedes prohibieron informar sobre hallazgos de cadáveres que en algunos casos han trascendido, sin embargo, por afectar a otros países, por su magnitud genocida o por el espanto provocado entre sus propias fuerzas.

Veinticinco cuerpos mutilados afloraron entre marzo y octubre de 1976 en las costas uruguayas, pequeña parte quizás del cargamento de torturados hasta la muerte en la Escuela de Mecánica de la Armada, fondeados en el Río de la Plata por buques de esa fuerza, incluyendo el chico de 15 años, Floreal Avellaneda, atado de pies y manos, “con lastimaduras en la región anal y fracturas visibles” según su autopsia.
Un verdadero cementerio lacustre descubrió en agosto de 1976 un vecino que buceaba en el Lago San Roque de Córdoba, acudió a la comisaría donde no le recibieron la denuncia y escribió a los diarios que no la publicaron.
Treinta y cuatro cadáveres en Buenos Aires entre el 3 y el 9 de abril de 1976, ocho en San Telmo el 4 de julio, diez en el Río Luján el 9 de octubre, sirven de marco a las masacres del 20 de agosto que apilaron 30 muertos a 15 kilómetros de Campo de Mayo y 17 en Lomas de Zamora.
En esos enunciados se agota la ficción de bandas de derecha, presuntas herederas de las 3 A de López Rega, capaces de atravesar la mayor guarnición del país en camiones militares, de alfombrar de muertos el Río de la Plata o de arrojar prisioneros al mar desde los transportes de la Primera Brigada Aérea, sin que se enteren el general Videla, el almirante Massera o el brigadier Agosti. Las 3 A son hoy las 3 Armas, y la Junta que ustedes presiden no es el fiel de la balanza entre “violencias de distintos signos” ni el árbitro justo entre “dos terrorismos”, sino la fuente misma del terror que ha perdido el rumbo y sólo puede balbucear el discurso de la muerte.
La misma continuidad histórica liga el asesinato del general Carlos Prats, durante el anterior gobierno, con el secuestro y muerte del general Juan José Torres, Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruíz y decenas de asilados en quienes se ha querido asesinar la posibilidad de procesos democráticos en Chile, Bolivia y Uruguay.
La segura participación en esos crímenes del Departamento de Asuntos Extranjeros de la Policía Federal, conducido por oficiales becados de la CIA a través de la AID, como los comisarios Juan Gattei y Antonio Gettor, sometidos ellos mismos a la autoridad de Mr. Gardener Hathaway, Station Chief de la CIA en Argentina, es semillero de futuras revelaciones como las que hoy sacuden a la comunidad internacional que no han de agotarse siquiera cuando se esclarezcan el papel de esa agencia y de altos jefes del Ejército, encabezados por el general Menéndez, en la creación de la Logia Libertadores de América, que reemplazó a las 3 A hasta que su papel global fue asumido por esa Junta en nombre de las 3 Armas.
Este cuadro de exterminio no excluye siquiera el arreglo personal de cuentas como el asesinato del capitán Horacio Gándara, quien desde hace una década investigaba los negociados de altos jefes de la Marina, o del periodista de Prensa Libre Horacio Novillo apuñalado y calcinado, después que ese diario denunció las conexiones del ministro Martínez de Hoz con monopolios internacionales.
A la luz de estos episodios cobra su significado final la definición de la guerra pronunciada por uno de sus jefes: “La lucha que libramos no reconoce límites morales ni naturales, se realiza más allá del bien y del mal”.

5. Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.

En un año han reducido ustedes el salario real de los trabajadores al 40%, disminuido su participación en el ingreso nacional al 30%, elevado de 6 a 18 horas la jornada de labor que necesita un obrero para pagar la canasta familiar, resucitando así formas de trabajo forzado que no persisten ni en los últimos reductos coloniales.
Congelando salarios a culatazos mientras los precios suben en las puntas de las bayonetas, aboliendo toda forma de reclamación colectiva, prohibiendo asambleas y comisiones internas, alargando horarios, elevando la desocupación al récord del 9% prometiendo aumentarla con 300.000 nuevos despidos, han retrotraído las relaciones de producción a los comienzos de la era industrial, y cuando los trabajadores han querido protestar los han calificados de subversivos, secuestrando cuerpos enteros de delegados que en algunos casos aparecieron muertos, y en otros no aparecieron.
Los resultados de esa política han sido fulminantes. En este primer año de gobierno el consumo de alimentos ha disminuido el 40%, el de ropa más del 50%, el de medicinas ha desaparecido prácticamente en las capas populares. Ya hay zonas del Gran Buenos Aires donde la mortalidad infantil supera el 30%, cifra que nos iguala con Rhodesia, Dahomey o las Guayanas; enfermedades como la diarrea estival, las parasitosis y hasta la rabia en que las cifras trepan hacia marcas mundiales o las superan. Como si esas fueran metas deseadas y buscadas, han reducido ustedes el presupuesto de la salud pública a menos de un tercio de los gastos militares, suprimiendo hasta los hospitales gratuitos mientras centenares de médicos, profesionales y técnicos se suman al éxodo provocado por el terror, los bajos sueldos o la “racionalización”.
Basta andar unas horas por el Gran Buenos Aires para comprobar la rapidez con que semejante política la convirtió en una villa miseria de diez millones de habitantes. Ciudades a media luz, barrios enteros sin agua porque las industrias monopólicas saquean las napas subterráneas, millares de cuadras convertidas en un solo bache porque ustedes sólo pavimentan los barrios militares y adornan la Plaza de Mayo, el río más grande del mundo contaminado en todas sus playas porque los socios del ministro Martínez de Hoz arrojan en él sus residuos industriales, y la única medida de gobierno que ustedes han tomado es prohibir a la gente que se bañe.
Tampoco en las metas abstractas de la economía, a las que suelen llamar “el país”, han sido ustedes más afortunados. Un descenso del producto bruto que orilla el 3%, una deuda exterior que alcanza a 600 dólares por habitante, una inflación anual del 400%, un aumento del circulante que en solo una semana de diciembre llegó al 9%, una baja del 13% en la inversión externa constituyen también marcas mundiales, raro fruto de la fría deliberación y la cruda inepcia.
Mientras todas las funciones creadoras y protectoras del Estado se atrofian hasta disolverse en la pura anemia, una sola crece y se vuelve autónoma. Mil ochocientos millones de dólares que equivalen a la mitad de las exportaciones argentinas presupuestados para Seguridad y Defensa en 1977, cuatro mil nuevas plazas de agentes en la Policía Federal, doce mil en la provincia de Buenos Aires con sueldos que duplican el de un obrero industrial y triplican el de un director de escuela, mientras en secreto se elevan los propios sueldos militares a partir de febrero en un 120%, prueban que no hay congelación ni desocupación en el reino de la tortura y de la muerte, único campo de la actividad argentina donde el producto crece y donde la cotización por guerrillero abatido sube más rápido que el dólar.

6. Dictada por el Fondo Monetario Internacional según una receta que se aplica indistintamente al Zaire o a Chile, a Uruguay o Indonesia, la política económica de esa Junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales encabezados por la ITT, la Esso, las automotrices, la U.S. Steel, la Siemens, al que están ligados personalmente el ministro Martínez de Hoz y todos los miembros de su gabinete.
Un aumento del 722% en los precios de la producción animal en 1976 define la magnitud de la restauración oligárquica emprendida por Martínez de Hoz en consonancia con el credo de la Sociedad Rural expuesto por su presidente Celedonio Pereda: “Llena de asombro que ciertos grupos pequeños pero activos sigan insistiendo en que los alimentos deben ser baratos”.
El espectáculo de una Bolsa de Comercio donde en una semana ha sido posible para algunos ganar sin trabajar el cien y el doscientos por ciento, donde hay empresas que de la noche a la mañana duplicaron su capital sin producir más que antes, la rueda loca de la especulación en dólares, letras, valores ajustables, la usura simple que ya calcula el interés por hora, son hechos bien curiosos bajo un gobierno que venía a acabar con el “festín de los corruptos”.
Desnacionalizando bancos se ponen el ahorro y el crédito nacional en manos de la banca extranjera, indemnizando a la ITT y a la Siemens se premia a empresas que estafaron al Estado, devolviendo las bocas de expendio se aumentan las ganancias de la Shell y la Esso, rebajando los aranceles aduaneros se crean empleos en Hong Kong o Singapur y desocupación en la Argentina. Frente al conjunto de esos hechos cabe preguntarse quiénes son los apátridas de los comunicados oficiales, dónde están los mercenarios al servicio de intereses foráneos, cuál es la ideología que amenaza al ser nacional.
Si una propaganda abrumadora, reflejo deforme de hechos malvados no pretendiera que esa Junta procura la paz, que el general Videla defiende los derechos humanos o que el almirante Massera ama la vida, aún cabría pedir a los señores Comandantes en Jefe de las 3 Armas que meditaran sobre el abismo al que conducen al país tras la ilusión de ganar una guerra que, aun si mataran al último guerrillero, no haría más que empezar bajo nuevas formas, porque las causas que hace más de veinte años mueven la resistencia del pueblo argentino no estarán desaparecidas sino agravadas por el recuerdo del estrago causado y la revelación de las atrocidades cometidas.
Estas son las reflexiones que en el primer aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles.

Rodolfo Walsh. – C.I. 2845022
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977.

24 DE MARZO: "LO QUE USTEDES LLAMAN ACIERTOS, SON ERRORES, LO QUE LLAMAN ERRORES, SON CRÍMENES, Y LO QUE OMITEN, SON CALAMIDADES"

por Organizaciones sociales y políticas de la República Argentina. Fotos de la cobertura colectiva de la Agencia Resistir y Luchar (Resumen Latinoamericano, Revista Venceremos, FM Riachuelo)


más de medio millón de argentinos se movilizaron en la ciudad de Buenos Aires

 

En Argentina, el 24 de marzo es el Día Nacional de la Memoria, la Verdad y la Justicia, día así instituido en el año 2002 por el Congreso, y que luego, en 2005, durante la presidencia de Néstor Kirchner, se estableció como feriado nacional inamovible. Se eligió esa fecha en relación con el golpe de Estado ocurrido el 24 de marzo de 1976, cuando una banda de militares cipayos tomó el poder para beneficio de los Estados Unidos y, para sofocar la resistencia patriótica, desde el Estado estos criminales llevaron a cabo un plan terrorista de masacres, torturas y desaparición de personas. El concepto del 24 de marzo es mantener viva la Memoria y la Verdad para luchar por la Justicia; no olvidar la naturaleza nefasta del Mal para mantener viva la necesidad de luchar por el Bien.


24-03-2017: la presencia de los desaparecidos en la multitud de la Patria

Actualmente el presidente Mauricio Macri, a través de un “decreto de necesidad y urgencia”, pretendió cambiar la fecha de este feriado, y estableció que no sea inamovible. La viva oposición social a esta intención impidió el deseo presidencial que consiste -como buen entreguista antinacional que Macri es- en la pretención de corromper la Memoria Histórica para igualar a cipayos con patriotas, a criminales con mártires, a gusanos con honorables, a despreciables con indispensables.

El pueblo argentino contestó ayer con más de medio millón de manifestantes en la Capital Federal, y cientos de miles, incalculables, a lo largo y a lo ancho de todo el país.


24-03-2017:  la voluntad nacional fluye por las calles para recuperar la Soberanía

A continuación, la declaración completa elaborada por las organizaciones populares convocantes, declaración que es el marco político-ideológico de esta desbordante, masiva y magnífica movilización de un pueblo que resiste al cipayaje del contubernio macrista.


24-03-2017: la Plaza de Mayo desborda de Pueblo

A 41 años del Golpe de Estado genocida de Videla, Agosti, Massera, de los grupos económicos, la cúpula de la Iglesia, de la corporación judicial, la Embajada de Estados Unidos, venimos nuevamente a esta Plaza a repudiar los crímenes de lesa humanidad: las miles de desapariciones forzadas, asesinatos y presos políticos; las torturas; el robo de bebés; el funcionamiento de cientos de centros clandestinos de detención, tortura y exterminio; la censura; la mentira organizada; la pobreza programada; una Guerra por Malvinas con delitos de lesa humanidad; la deuda externa que causó hambre por décadas; el exilio al que fueron obligadas miles de personas; el terrorismo de Estado.
Este año, además, venimos a denunciar los enormes retrocesos en materia de derechos humanos que sufre nuestro pueblo: la miseria planificada, la persecución política, la represión y el encarcelamiento de militantes, la pérdida de la soberanía política y económica.
Aquel 24 de marzo de 1976, la Casa de Gobierno fue ocupada por la Junta Militar. Con los sectores civiles del terror, desde ahí se ejecutó un plan criminal y sistemático de exterminio y empobrecimiento del país. Con un modelo económico de exclusión y pobreza, con la represión organizada en cientos de centros clandestinos en todo el país, la planificación del robo de bebés, la militarización de fábricas, la prohibición de la organización política, la entrega del país a los capitales internacionales, esa Junta genocida inició un período cuyo preludio había sido la nefasta Triple A, Alianza Anticomunista Argentina.
Con la coordinación de las dictaduras del Cono Sur a través del Plan Cóndor, toda nuestra región se volvió un lugar de terror y hambre, pero también de luchas y resistencias con la organización social, política, sindical y estudiantil de nuestros pueblos. Hubo miles de presos políticos, miles de exiliados, miles de detenidos-desaparecidos, miles de asesinados en Argentina, Chile, Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia.
En ese contexto de terrorismo de Estado, cuando los genocidas cometían sus crímenes a diario, cuando masacraban a los religiosos tercermundistas, cuando secuestraban a las comisiones internas de las fábricas, cuando desaparecían a los jóvenes estudiantes como los de La Noche de los Lápices, cuando se llevaban a las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo, los medios masivos de comunicación que fueron el órgano de propaganda y de acción psicológica de ese plan siniestro del horror, hablaban de cuerpos que aparecían de la nada, o de “enfrentamientos” para ocultar los fusilamientos. Mentían. Organizaban la mentira desde las oficinas de Clarín, La Nación, La Nueva Provincia o la Editorial Atlántida, entre tantos otros. Entre las empresas y grupos económicos responsables de ese plan de exterminio, denunciamos a la Sociedad Rural Argentina, Ledesma, Ford, Fiat, Mercedes Benz, La Veloz del Norte, Acíndar, Dálmine-Siderca, Loma Negra y muchas más. Eran los empresarios del terrorismo de Estado, quienes con la cúpula de la Iglesia, la corporación judicial y la Embajada de Estados Unidos, integraron el sector civil de esa dictadura. Todos esos responsables civiles deben ser juzgados y condenados.
El 24 de marzo de 1976 se dio un Golpe genocida que instaló el terrorismo de Estado. El horror fue planificado desde el Estado. Nadie puede negar la dimensión de esos crímenes ni el número de víctimas, son 30.000 personas que el Estado hizo desaparecer por su militancia. Por eso, porque reivindicamos las luchas de los 30.000 detenidos-desaparecidos, porque nos faltan desde hace más de 40 años y aún no hemos tenido la posibilidad de recuperar sus restos, decimos: ¡repudiamos toda expresión negacionista!

24-03-2017:  Corriente Patria Para Todos

En esta Plaza, recordamos las luchas en los ingenios azucareros, las Ligas Agrarias, el Cordobazo, el Rosariazo y las comisiones internas en las fábricas, el movimiento sindical, estudiantil y popular, la militancia en las organizaciones del Peronismo Revolucionario: UES, Montoneros, FAP, Sacerdotes por el Tercer Mundo y FAL; la tradición guevarista del PRT, Ejército Revolucionario del Pueblo; y las tradiciones socialistas y comunistas: Partido Comunista, Vanguardia Comunista, PCR y PST; y tantos espacios en los que miles de compañeras y compañeros lucharon por una Patria justa, libre y solidaria. Nadie, y menos desde el Estado, puede poner en duda que ¡SON 30.000! Y en esta Plaza, y con todo el pueblo, ante la Casa de Gobierno, gritamos: ¡presentes, ahora y siempre!
También seguimos reclamando la urgente apertura y desclasificación de absolutamente todos los archivos, tanto en el país como en otros lugares del mundo, para saber todos los nombres de los culpables y qué hicieron con los cuerpos de las víctimas. 

24-03-2017: las dos CTA en una misma cabecera

En plena dictadura, vinimos a esta Plaza a exigir saber dónde estaban los desaparecidos. El próximo 30 de abril se cumplirán los 40 años de lucha de las Madres de Plaza de Mayo. Empezaron a caminar acá mismo, mientras a su alrededor tenían a las Fuerzas represivas de la dictadura. Caminaron, denunciaron, reclamaron, buscaron. El pañuelo blanco se conoció en el mundo con el grito que trajeron a esta misma Plaza: ¡aparición con vida! Esas Madres desafiaron al terror y se unieron por la búsqueda de sus hijos, hijas y de los 30.000. Fueron perseguidas, secuestradas, torturadas, desaparecidas y arrojadas en los vuelos de la muerte. Son 40 años de lucha permanente por la memoria, la verdad y la justicia. Son 40 años de ejemplo, perseverancia, solidaridad y compromiso. Queridas Madres, queridas compañeras, a 40 años de lucha, con todo el pueblo en esta Plaza, queremos decirles: ¡Madres de la Plaza, el pueblo las abraza!
Hoy, las Madres abrazan al Pueblo y, recordando el doloroso peso del “mirar hacia otro lado”, las indiferencias y también ciertas nefastas connivencias y complicidades de aquellos trágicos años, hoy proclamamos y pedimos: nunca más el silencio.

24-03-2017:  “Resistir y Luchar”

Acá, y en todas las plazas del país en las que también hay marchas y actos, reivindicamos las luchas de los 30.000. Lo dijimos siempre, y más ahora, en tiempos en los que intentan reeditar los discursos del “no te metás”. Nos vamos a seguir metiendo, vamos a seguir denunciando el avasallamiento de derechos por parte del Gobierno antipopular de Mauricio Macri, vamos a seguir exigiendo la libertad para Milagro Sala y todas las presas y presos políticos, vamos a seguir denunciando los despidos, el hambre, el ajuste, la represión y la persecución política, vamos a seguir exigiendo la erradicación de la violencia institucional. No hay errores en las políticas neoliberales: hay hambre planificada.
En la Carta Abierta de Walsh, hoy se pueden volver a leer realidades que vivimos, porque el plan económico de este Gobierno democrático tiene los mismos objetivos que el de Martínez de Hoz: menos derechos para los trabajadores, apertura de las importaciones, destrucción de la industria nacional, aumento indiscriminado de la deuda externa y alineamiento con Estados Unidos y el FMI.

24-03-2017:  “La Cámpora”

La dictadura genocida del 76, con la Doctrina de la Seguridad nacional en la mano, construyó al denominado “enemigo interno” para justificar sus crímenes. Con despidos masivos y fábricas militarizadas, las trabajadoras y trabajadores organizados fueron el sector donde se concentró la mayor cantidad de víctimas. Como sostuvo Rodolfo Walsh en su Carta abierta “cuando los trabajadores han querido protestar, los han calificado de subversivos, secuestrando cuerpos enteros de delegados, que en algunos casos aparecieron muertos, y en otros no aparecieron”.
Hoy, 41 años después del Golpe, han reinstalado un plan económico de exclusión y, nuevamente, los trabajadores y trabajadoras vuelven a ser los principales perjudicados. Tanto en el sector privado como en el estatal, los despidos se cuentan de a miles, mientras intentan que regresemos a tiempos de flexibilización laboral. Los docentes, en reclamo por la paritaria nacional, son atacados no sólo públicamente, sino también con amenazas, como las sufridas por el compañero Roberto Baradel y su familia, hechos que repudiamos enérgicamente. Ese plan económico se complementa con la persecución a los trabajadores organizados, quienes representan la resistencia al proyecto neoliberal. Repudiamos enérgicamente la persecución a trabajadores y acompañamos la lucha que se da en cada lugar del país en defensa del derecho al trabajo, como AGR-Clarín, la cooperativa del Bauen, la Textil Neuquén, Atanor y tantas otras.

24-03-2017:  todos los pueblos y un mismo pueblo unido en la lucha

Los planes económicos de hambre tienen como condición necesaria la represión. Por eso, este Gobierno pretende imponer un protocolo de represión de las protestas sociales. Esa es su respuesta ante un pueblo organizado. Este Gobierno reprime y persigue, como lo demuestra la represión a mujeres en el Encuentro Nacional en Rosario y en la marcha del 8 de marzo, la represión a los pueblos originarios, como la comunidad mapuche de Cushamen, generada para defender los intereses de empresas multinacionales que nos siguen robando el territorio. Los pueblos originarios siguen sufriendo el abandono del Estado, que responde con represión para defender a los empresarios que son socios y amigos de Mauricio Macri, como Joe Lewis. La represión a las manifestaciones populares no son hechos aislados: son órdenes sistemáticas.
¡Basta de represión! ¡Basta de violencia institucional! Siempre lo dijimos y hoy lo repetimos: la represión nunca puede ser la respuesta a la protesta social. Vemos con profunda preocupación el aumento de la violencia institucional, cuyas principales víctimas son los jóvenes, como Ezequiel e Iván, integrantes de la Garganta Poderosa torturados por Gendarmería, las detenciones arbitrarias como sucedió con varios grupos detenidos al pintar murales por la libertad de Milagro Sala, y los controles policiales abusivos en espacios públicos. También seguimos exigiendo que las cárceles dejen de ser lugares de violación de derechos. Asimismo, exigimos el castigo a los culpables de los asesinatos de Luciano Arruga, y de los compañeros Darío Iki Julián y César Méndez, integrantes del Movimiento Popular La Dignidad.
Se hace difícil terminar con las violencias hacia las mujeres cuando hay un Estado que cierra áreas de atención y protección, o con un Poder Judicial patriarcal, que criminaliza a las víctimas, o con un Presidente de la Nación misógino. Hay mujeres que a diario pierden la vida por los femicidios o la trata de personas: mientras sectores del Poder Judicial, las Fuerzas de Seguridad y otros funcionarios, por acción u omisión, sean parte del delito, lejos estaremos de terminar con ese crimen que se roba a diario miles de vidas de mujeres, hombres, niños y niñas para la explotación sexual y/o laboral.
Además, con la excusa de enfrentar a la inseguridad, nuevamente, sectores de derecha pretenden criminalizar a los jóvenes, bajando la edad de imputabilidad. El Estado debe garantizar derechos, no vulnerarlos. El Estado no puede actuar en contra de tratados de protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes. Debe tomar medidas inclusivas y de promoción de derechos. Hoy vemos funcionarios más preocupados por meter presos a pibes de 14 años que por garantizarles salud y educación.

24-03-2017:  el camino trazado por los mártires retumba en los pasos de los que luchan

A 35 años de la Guerra por Malvinas, con un gobierno servil de las grandes potencias mundiales, tenemos que defender más que nunca nuestra soberanía. No podemos aceptar que organismos del Estado distribuyan mapas oficiales sin nuestras islas, como hizo el Ministerio de Desarrollo Social. Y así como apoyamos el proceso de identificación de los 123 cuerpos que siguen sin nombre en el cementerio de Darwin, acordado entre Argentina, Inglaterra y la Cruz Roja, seguimos exigiendo que se investiguen los crímenes de lesa humanidad cometidos contra los soldados argentinos y que se apoye y acompañe desde el Estado a los ex combatientes. ¡Las Malvinas son argentinas!
Nuestra identidad está en permanente construcción. Día a día, seguimos buscando a los nietos y nietas que faltan. Nacieron en el cautiverio de sus madres o fueron secuestrados junto a sus padres. Desde entonces, los seguimos buscando. Hasta ahora, hemos encontrado 121 de esas verdades, pero faltan muchas más. Por eso, al cumplirse en octubre los 40 años de lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo, seguimos necesitando que todo el pueblo se comprometa en la búsqueda de los más de 300 hombres y mujeres que viven bajo una identidad falsa. Si tienen algún dato que pueda contribuir a ese encuentro, por favor, díganlo. Hablen con ese posible hijo de desaparecidos para que se anime a dar el paso. Si dudan sobre su identidad, por favor, acérquense. También necesitamos que se rompan los pactos de silencio de los genocidas, quienes saben qué niños y niñas nacieron, en qué centro clandestino, a dónde fueron entregados y cuáles son las familias apropiadoras. Sin esa verdad, sin cada nieto con su familia, la deuda de nuestra democracia sigue siendo enorme.
En esta Plaza somos miles. Incluso, tal vez ya estén por acá los bisnietos, quienes también tienen derecho a conocer su identidad. Por eso, porque la identidad es un derecho, les pedimos que no se queden con la duda y se acerquen a las Abuelas: no sólo se van a encontrar con la verdad, sino también con el abrazo y el amor de la familia. Son 40 años buscando encuentros, 40 años encontrando verdades. Juntos, podemos vencer al miedo: ya es tiempo de encontrarnos.

los “mercaderes del templo” no tienen Patria; son la base del cipayaje

En esos mismos pactos de silencio de los genocidas está la información para saber dónde están los cuerpos de los miles de desaparecidos. Nos deben eso: después de 41 años, seguimos necesitando saber dónde están. A la desaparición forzada le siguieron años, y luego décadas, sin saber dónde están los cuerpos de nuestros familiares y compañeros. Necesitamos esa verdad de manera urgente, como también necesitamos que el Estado responda dónde está Jorge Julio López, a más de 10 años de su segunda desaparición forzada.
La búsqueda de justicia comenzó en pleno genocidio con la presentación de habeas corpus y reclamos y denuncias ante organismos nacionales e internacionales. La recuperación de la democracia permitió que las Juntas militares fueran juzgadas en 1985, pero las leyes de impunidad volvieron a poner a los genocidas en las calles. Sin embargo, nuestro pueblo siempre siguió luchando por Memoria, Verdad y Justicia en la Argentina y otros países. Así, se abrieron procesos judiciales en el exterior, mientras en el nuestro sólo podían avanzar las causas por apropiación. En el 2003, las luchas del pueblo fueron reconocidas en políticas de Estado. Desde el año 2003 hasta el 2015, con los Gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, se tomaron decisiones históricas en nuestro país, especialmente en las respectivas a las políticas de Estado de Memoria, Verdad y Justicia: se declaró la nulidad e inconstitucionalidad de las leyes de Obediencia Debida, Punto Final e Indultos, se reabrieron los juicios, fueron señalizados los ex centros clandestinos de detención, tortura y exterminio, y muchos de ellos recuperados como espacios de memoria. Un Presidente de la Nación, Néstor Kirchner, pidió perdón en nombre del Estado.

24-03-2017:  “hijos que parieron madres”

Hoy vemos cómo Mauricio Macri retrocede y se niega a hablar de los desaparecidos. A la par, vemos cómo sus funcionarios se reúnen con asociaciones que reivindican el terrorismo de Estado y además ejercen el negacionismo, como Gómez Centurión o Darío Lopérfido.
Los juicios a los genocidas se constituyeron en un ejemplo ante el mundo. Con todas las garantías constitucionales respetadas para los imputados y sin tribunales especiales, los juicios siguen en todo el país, porque ya son parte del pueblo argentino. Ya hay más de 750 genocidas condenados y vamos a seguir luchando por más Memoria, Verdad y Justicia, y para que el Estado no retroceda en sus responsabilidades. No vamos a permitir impunidad: el único lugar para un genocida es la cárcel común, perpetua y efectiva, no lo son sus casas ni las cárceles de lujo, como Campo de Mayo.
Tenemos que volver a denunciar que el Gobierno de Mauricio Macri no sólo cobija funcionarios negacionistas, sino que, además, gestiona retrocesos en las políticas de Memoria, Verdad y Justicia. Desde la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, se retiró la querella contra el civil de la dictadura Alejandro Reynal, no se apeló el sobreseimiento a Magnetto, Herrera de Noble y Mitre por Papel Prensa y se vaciaron espacios como el Programa “Verdad y Justicia”, clave en la colaboración con el Poder Judicial para impulsar investigaciones y causas. También fueron desmanteladas las Direcciones de Derechos Humanos del Ministerio de Seguridad y el Banco Central, dedicadas a buscar documentación de la dictadura y corre el mismo riesgo el equipo de Derechos Humanos del Ministerio de Defensa. Hoy vemos cómo estos discursos negacionistas y estos mensajes de desidia y desinterés del Gobierno operan sobre el Poder Judicial.
Repudiamos el accionar de una parte del Poder Judicial que hoy representa un peligro para el juzgamiento de los responsables del horror. Denunciamos las sentencias que consagran la “teoría de los dos demonios”, como la de la Masacre de Capilla del Rosario, y la impunidad de la participación civil, casos como el de Carlos Pedro Tadeo Blaquier, dictados por las Salas III y IV de la Cámara Federal de Casación Penal. En ese sentido, es responsabilidad de la Corte Suprema de Justicia de la Nación impedir que la Cámara de Casación vuelva a frenar estos juicios, revocando estos fallos y también confirmando otros que dejaron en claro que el terrorismo de Estado empezó mucho antes del Golpe del ´76, como el de la Masacre de Trelew. No alcanza con reuniones y declaraciones: de los jueces, queremos que agilicen los juicios, sentencias que reconozcan el terrorismo de Estado y que hagan justicia.
En el año que pasó también se consiguieron logros importantes. Por primera vez un empresario, Marcos Levín, fue condenado por crímenes de lesa humanidad. Por primera vez un juez fue condenado por entregar a una hija de desaparecidos, adoptada ilegalmente. En Córdoba se dictó una sentencia histórica por los crímenes de La Perla. Vamos a seguir militando para que cada vez sean más, para que cada vez haya más genocidas en la cárcel. En esta misma plaza reclamamos que el Poder Judicial investigara si César Milani había cometido delitos de lesa humanidad. Hoy celebramos que la justicia haya avanzado y una vez más gritamos bien fuerte ¡JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS GENOCIDAS!

24-03-2017:  “por el revolución y el socialismo”

Los juicios por delitos de lesa humanidad necesitan el compromiso de los tres Poderes del Estado. Una vez más, exigimos al Poder Legislativo que conforme la Comisión Bicameral para la investigación de la participación civil en delitos de lesa humanidad, como también reclamamos que cesen los intentos de remover a la Procuradora General, Alejandra Gils Carbó.
Estamos acá, en esta Plaza, en el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia. Meses atrás, el Gobierno intentó mover este feriado para convertirlo en un día de paseo y con el objetivo de reducir las movilizaciones. Pero eso es imposible: nuevamente, somos miles en las calles y plazas del país. El 24 de marzo es una fecha en la que nuestro pueblo recuerda, reivindica, denuncia y fortalece la lucha.
Además, en este marzo de movilizaciones, fuimos miles de personas en las calles y las plazas apoyando la lucha docente en defensa de la educación pública, miles apoyando el paro y la movilización de las mujeres en la lucha contra el patriarcado, miles de trabajadores y trabajadoras reclamándole al Gobierno por nuestros derechos.
A 41 años del Golpe, reafirmamos nuestro compromiso con el proyecto de país por el que lucharon los 30.000 y todos los compañeros y compañeras de nuestros países hermanos, organizados contra las dictaduras de la región. Seguimos defendiendo esta Patria Grande, a pesar de los ataques permanentes, como el año pasado con el golpe a la compañera Dilma Rousseff, con los intentos de derrocar a Nicolás Maduro o de debilitar el Gobierno de Evo Morales. ¡Fuerza, compañeros y compañeras de la Patria Grande!
Basta de discriminar a las personas migrantes. Repudiamos enérgicamente las medidas dispuestas para poner en funcionamiento una cárcel para migrantes, como también los intentos para institucionalizar la discriminación y xenofobia. Somos pueblos hermanos y lo seguiremos siendo. Quienes gobiernan, deben entenderlo y respetarlo.
Los gobernantes también deben escuchar los reclamos por la libertad de Milagro Sala, Gladys Díaz, Mirta Aizama, Alberto Cardozo, Mirta Rosa Guerrero, Javier Nievas y Graciela López, integrantes de la Organización Tupac Amaru, presos y presas políticas del Gobernador Gerardo Morales, el Presidente Mauricio Macri y el empresario responsable de crímenes de lesa humanidad, Carlos Pedro Tadeo Blaquier.
Una Argentina con presos y presas políticas como Milagro Sala, situación cuestionada incluso por organismos internacionales, con miseria planificada como realidad en cada familia, con precios que suben mientras los salarios bajan, con represión como respuesta sistemática a la protesta social, con desocupación masiva, con fábricas que deben cerrar mientras se abren todas las puertas del país a la importación, con el miedo y la persecución política como amenaza, la persecución a sindicatos opositores, con un mercado interno que privilegia a las multinacionales por sobre las pequeñas y medianas empresas nacionales, con un plan económico de exclusión de las mayorías, con genocidas y golpistas desfilando en actos oficiales.
Éste no es el país por el que lucharon los 30.000. Por eso, porque nacimos en sus luchas y viven en las nuestras, vamos a seguir luchando por una Argentina para todos y todas, con libertad, inclusión, igualdad y solidaridad. Cuando la violencia, el hambre y la exclusión son organizados desde el Estado de manera sistemática, no hay errores: lo que hay es un Gobierno que avasalla los derechos del pueblo.
A 41 años del Golpe cívico-militar, denunciamos el mismo plan económico y sostenemos la misma lucha. Por eso, exigimos: ¡BASTA DE MISERIA PLANIFICADA!
Ante un Gobierno que vulnera los derechos del pueblo, seguimos respondiendo con lucha, compromiso y solidaridad. Vamos a seguir en las calles, las plazas, las luchas. Vamos a seguir gritando ¡PRESENTES! por los 30.000, porque detrás del negacionismo está el intento de olvido, y detrás del intento de olvido está la intención de desmovilizarnos, de volver a “foja cero” las luchas. No nos han vencido: ¡estamos acá, en unidad, con el pueblo, con las banderas de los 30.000 en alto!

24-03-2017:  manifestantes con la foto de la heroína Norma Arrostito

Mañana se cumplirán 40 años de aquel 25 de marzo de 1977, cuando los genocidas de la ESMA masacraron a Rodolfo Walsh. A poco más de un año del inicio del Gobierno de Mauricio Macri, con las palabras de Walsh, decimos: “lo que ustedes llaman aciertos, son errores, los que reconocen como errores, son crímenes, y lo que omiten, son calamidades”.

¡LIBERTAD A LAS PRESAS Y PRESOS POLÍTICOS!

¡RESTITUCIÓN DE LA IDENTIDAD DE LOS NIETOS Y NIETAS!

¡JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS GENOCIDAS!

¡BASTA DE REPRESIÓN AL PUEBLO!

¡BASTA DE MISERIA PLANIFICADA!

¡30.000 DETENIDOS-DESAPARECIDOS: PRESENTES, AHORA Y SIEMPRE!

¡30.000 DETENIDOS-DESAPARECIDOS: PRESENTES, AHORA Y SIEMPRE!

¡30.000 DETENIDOS-DESAPARECIDOS: PRESENTES, AHORA Y SIEMPRE!

jueves, 16 de marzo de 2017

LAS CTA PONEN FECHA EL 30 DE MARZO PARA EL PARO NACIONAL

En un plenario conjunto realizado el 14 de marzo, con la participación de más de 2 mil delegados y secretarios generales de todo el país, las dos CTA (la CTA Autónoma y la CTA de los Trabajadores) definieron como fecha del paro nacional el 30 de marzo, tomando como referencia el histórico paro nacional del 30 de marzo de 1982, que fue el preludio de la caída de la dictadura militar.

A continuación, el discurso de los secretarios generales de ambas CTA, Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores) y Pablo Miceli (CTA Autónoma)

 

columnas marchando en la movilización del 7 de marzo

 


Hugo Yasky

Primero expresarles la emoción que tenemos porque no es un plenario más. Esta fecha va a quedar en la historia de la clase trabajadora argentina y en la historia nuestra. Particularmente en la historia nuestra. Es el primer plenario unificado en esta apuesta que hemos hecho a volver a darles a la CTA, la Autónoma y la de los Trabajadores, a los trabajadores y trabajadoras, que nosotros representamos, y a muchos otros, que no están en la CTA, pero que hoy ven, en esto que representa nuestra construcción sindical, una expectativa, una alternativa, un camino, una voz legítima.
Decía es volver a darnos la oportunidad de la unidad. Y esto debemos defenderlo a muerte. Siempre hay en el camino de la unidad, aquéllos que van a tratar de poner palos en la rueda. Pero hay que hacer el esfuerzo. Hay que tener la perseverancia, la obstinación, de saber que en momentos en que sufrimos una agresión a escala nunca antes conocida, porque hoy, el gobierno de Macri, no es un gobierno más de la derecha de la Argentina. Hoy el gobierno de Macri es el gobierno de la clase dominante. Nunca como antes en la Argentina, por lo menos, desde que conocemos la democracia, nos había gobernado la clase dominante y los sectores vinculados a los intereses multinacionales de esa clase dominante.
Esto solo bastaría para explicar por qué hoy crece la desocupación. Por qué hoy en el medio de la apertura económica, que algunos festejan, son muy pocos, empiezan a desmoronarse las pequeñas y medianas empresas. Empiezan a desaparecer los que generan 8 de cada 10 puestos de trabajo. Esto explica también, por qué la obstinación, por qué esa especie de actitud pertinaz, que pretende bajar el costo salarial, como si eso fuese lo único que le va a garantizar a la Argentina esa competitividad de la que hablan los empresarios. Este es un gobierno que vino a llenarse los bolsillos y a llenar los bolsillos a los que tienen la sartén por el mango y viene a destruir el salario, las conquistas; viene a arremeter contra la democracia. Estos que se llenaban la boca hablando que había que dejar atrás la Argentina de la confrontación, que había que ir a una República transparente; a una República en la que se respetaran los derechos, hoy tienen a una presa política como Milagro Sala, hace más de un año y ninguno se hace cargo de eso.
Y va a ser así, la garantía de que para Milagro, en el final del camino, va a estar la libertad, es el pueblo luchando en la calle, y también el repudio popular para Morales, y esa garantía va a ser el pueblo luchando en la calle.
Estamos viviendo momentos históricos en la Argentina. Cuando nosotros hace más o menos 20 días, dijimos que marzo iba a quedar en la historia de las luchas populares, algunos periodistas se sonreían socarronamente y pensaban que se trataba simplemente de una frase echada al azar. Pero marzo está quedando en la historia de las luchas populares. No se van a olvidar las jornadas históricas de las movilizaciones, del paro de los docentes en defensa de la escuela pública, de las paritarias libre, porque hoy es un caso testigo el de los docentes.
Y va a quedar también en la historia ese acto multitudinario, la movilización más grande que se haya conocido desde que gobierna Macri. Ese acto, hecho en un lugar extraño, de difícil acceso, hecho por algunos que esperaban que con esa dificultad para entrar iban a desalentar la participación popular, pero lo cierto es que el pueblo dijo Basta, y fue con la CGT y fuimos con la CTA, y ahí reclamó el Paro General que el pueblo argentino vine pidiendo desde hace meses.
Nosotros, las dos CTA, fuimos a ese acto, convencidos de que hay que apuntalar la unidad en la acción; convencidos que hay que estar ahí, donde nuestro pueblo, en que jornadas que van a ser históricas, va a dirimir la pulseada contra este gobierno, que cuando empiece a perder lo poco que todavía le queda de adhesión popular, se va a replegar sobre si mismo y va a generar situaciones de represión. Pero cuando hay represión, solamente las manos en la espada con el pueblo en la calle, y por eso nosotros, el día 7 fuimos a la convocatoria de la CGT absolutamente conscientes de que por encima de las diferencias había que privilegiar la unidad en la acción.
Pero también está claro que la unidad en la acción, tiene un límite. No vamos a estar esperando indefinidamente que las vacilaciones, que las traiciones, y que las jugadas de algunos sectores de la CGT, que tratan de alargar la luna de miel con el presidente Mauricio Macri, nos lleven atrás de convocatorias que finalmente nunca se corporizan. Por eso nosotros, junto a los compañeros de la CTA Autónoma, junto con Pablo Micheli decidimos convocar a este plenario, para decir con todas las letras: Vamos con la unidad en la acción y esa unidad en la acción, si no tiene la convocatoria que se espera desde la CGT, esa unidad en la acción, si no tiene la convocatoria que se espera desde la CGT, esa unidad en la acción tiene que tener la unidad en la acción de las dos CTA, para demostrar que el tiempo de la resistencia contra Macri no admite más demoras.
Por eso hicimos los plenarios en todo el país. Por eso hoy ustedes vienen acá con un mandato muy claro: ponerle fecha al paro general.
Y tenemos que llegar al paro general, como venimos transitando estos meses y estos días. Tenemos que llegar al paro general en la calle, acompañando la lucha de los compañeros docentes. Entre el 20 y el 22 de marzo una Marcha Federal Educativa, que va a conmover al país; que va a arrancar de cada provincia; que va a recorrer, no las calles de la Argentina. Va a recorrer el alma y el corazón de nuestro pueblo, por lo va a poner de pie. Ahí tenemos que estar todos todos los CTA; todos los movimientos sociales, porque ésta es nuestra lucha. No es sólo el paro docente. Es unir la lucha de la clase trabajadora contra ellos.
Tenemos que llegar al paro movilizándonos multitudinariamente el 24 de Marzo para decirle a Macri: vos, que querías hacer movible el 24 de Marzo; vos que descendés de aquéllos que fueron cómplices de la dictadura genocida, mirá el pueblo en la calle y entendé, que la Memoria, la Verdad y la Justicia no se negocian.
Y en esa consecuencia, y con esa convicción, reivindicamos, como fecha del Paro Nacional, el 30 de Marzo.
Hay una línea histórica, una línea de coherencia, entre nosotros y los que tenemos de la vereda de enfrente. Para la clase dominante argentina hay una línea que nos une con aquéllos que fueron parte de la dictadura cívico-militar. Fue una dictadura de clase. Y para nosotros, de este lado, también hay una línea histórica, y hay lazos de sangre, con José Benedicto Ortiz el compañero asesinado en Mendoza; con Dalmiro Flores, el compañero asesinado el 30 de marzo por marchar en la calle, contra la dictadura militar, en el año 1982.
Sé que hoy tenemos la oportunidad de que esta historia de unidad de las dos CTA, no sea el producto de un acuerdo en un salón a puertas cerradas.
Esta unidad tiene que ver con la lucha. Esta unidad tiene que ver con el compromiso de clase. Esta unidad tiene que ver con la decisión de sostener con autonomía, en confrontación contra el propio Macri, contra los ajustadores, contra el imperialismo yankee, reivindicar los movimientos populares y democráticos de América Latina, los gobiernos de izquierda y decirle al mundo: La clase trabajadora argentina, el pueblo argentino, no se entregan.
Gracias compañeros, por esta oportunidad que nos estamos dando.

Pablo Micheli

Muy impactado por este plenario. No es que no hayamos estado reunidos con los compañeros de la mesa en otros plenarios. Miles de plenarios durante nuestra militancia, dentro de la CTA, nuestro sindicato, pero éste era un desafío. Más allá que Hugo, yo, algunos dirigentes de las dos CTA nos pudiéramos sentar a discutir la posibilidad de construir un camino que fuera un poco más allá de lo que fue el año pasado, que no fue menor, fue muy importante. Que le dimos una pelea muy fuerte a la entrega del macrismo y a la complicidad sindical. Esa complicidad sindical que se sigue mostrando todavía, como ocurrió el 7 en el palco que montaron ahí, en ese lugar. En esa encerrona trágica, donde pensaban que no iba a ir gente, que apuraron los discursos vacíos de contenido. Esa complicidad de esos dirigentes sindicales que son oficialistas de todos los gobiernos. Los compañeros de ATE los conocen bien. Siempre están. El problema es de los gobiernos que los aceptan, pero ellos son oficialistas de todos los gobiernos que pasen. Ustedes saben bien a qué me refiero. Y como están esos dirigentes estatales, también están los dirigentes del sector privado que siempre han actuado con complicidad, inclusive durante la dictadura militar en nuestro país.
Por eso siempre surgieron en nuestra Argentina, alternativas que la clase trabajadora se fue dando. Hombres y mujeres que fueron peleando para cambiar lo que estaba establecido e instituido. Para decir, acá no es lo único y por eso estuvo la CGT de los Argentinos, el Programa de Huerta Grande, y tantos ejemplos de resistencia y lucha con Tosco, con todos aquellos luchadores que se pusieron la camiseta del pueblo para salir a la calle. Como Germán, en su momento, enfrentando la entrega del menemismo, como los compañeros desaparecidos, como el compañero Arancibia, y tantos otros compañeros que dieron la vida para cambiar esta historia.
Pero lamentablemente en nuestro país, ocurre, parece que es un estigma que tenemos los militantes populares. Un estigma que tenemos quienes estamos en los sindicatos, en las organizaciones sociales, en los partidos del campo popular. Pareciera que aquéllos que traicionan el mandato del pueblo, rápidamente se vuelven a reciclar y aparecen nuevamente en escena.
Cada vez que hay dirigentes que han sido cómplices de la entrega de nuestro país, pasa un tiempito, se esconden y vuelven a aparecer.
Comienza a agotarse ese tiempo, porque no sólo somos los dirigentes y los cuadros, los que empezamos a criticar ese tipo de conducción política, social y sindical, comienza la gente en general, también a hacerlo. Y la expresión del palco del otro día, no fue un orga preparada. Fue la reacción de muchos compañeros y compañeras delegados de base que están podridos que les digan no. Que le muevan el arco todos los días, sin decir cuándo va a ser el paro, y no lo hacen nunca. ¿Por qué? Porque los seduce la mesa de negociaciones. Los seducen las prebendas del gobierno y esto es lo que hay que transformar. Por eso este plenario adquiere una importancia superior, porque se hace en diversidad. Porque no todos los que estamos acá pensamos igual, pero sí hay algo que nos une. Somos de la misma clase. Somos trabajadoras y trabajadores y queremos transformar la realidad. No queremos quedarnos con esta porquería que nos ofrecen. Queremos un país para todos. Un país donde no haya pibes con hambre. Un país en el que haya trabajo digno y un país donde no nos roben y nos esquilmen como lo hace Macri.
Compañeras y compañeros, hay esa complicidad porque no puede haber reforma laboral para flexibilizar en la Argentina, sin complicidad sindical. Pero también hay otra complicidad sindical, que en nombre de que son los más combativos, los más puros, los más inmaculados, terminan haciéndole el juego al enemigo. Siempre terminan rompiendo y siempre terminan buscando irse, paralelamente a la marcha que hacemos. Siempre terminan diciendo que no hay que juntarse. Que la unidad de la base es un negocio del kirchnerismo, o que no hay que estar juntos porque somos dos cosas distintas. Y la verdad que los trabajadores y las trabajadoras piden a gritos en todas partes unidad para derrotar el ajuste. No hay destino sino hay unidad. Poca grandeza tendríamos los dirigentes si no escuchamos el clamor de nuestro pueblo.
Y no necesitamos que nos vengan a decir nada. Recorremos. Estamos en todos los sectores donde hay conflicto y todos los compañeros y compañeras reclaman ese camino.
Compañeras y compañeros, como dice Hugo, no estamos construyendo la unidad en base a un papelito. Estamos construyendo la unidad al calor de la lucha, y al calor de la lucha con autonomía e independencia. También, no sólo de los partidos y los gobiernos. También autonomía de los que nos quieren llevar de las narices; también autonomía de ese triunvirato que no se pone al frente de la lucha. Y la CTA dice: muy bien señores. Si no lo hacen ustedes, lo hacemos nosotros, porque tenemos decisión, tenemos coraje, para ir a pelear. Tenemos lo que hay que tener, porque sabemos que el camino es la unidad, pero la unidad sin lucha es algo amorfo. La unidad sin lucha es un amontonamiento, una mentira.
No se puede hablar de unidad sentado en un café. Hay que hablar de unidad en cualquier lugar, pero fundamentalmente hay que hablar de unidad cuando van a la calle juntos, defendiéndonos y yendo al frente para derrotar esta política de ajuste. Y ése es el valor de este plenario, que lo anunciamos a principios de este año con Hugo y otros compañeros. Que nos animamos en un contexto de contradicción. No lo vamos a negar ni esconder, que este camino de la unidad no es sencillo. No vamos a esconder que todavía hay cosas que tenemos que saldar entre nosotros. Pero nunca esas cosas nos pueden tapar el bosque. Nunca ese árbol de las diferencias puede estar por encima de lo más importante, que es ver la necesidad de construir poder popular en nuestro país. No se puede construir poder popular si esta CTA no tiene la fortaleza de volver a ser aquella CTA clasista, antiimperialista, como decía Hugo si no tiene la fortaleza de plantarse frente a los gobiernos, sin negar la posibilidad de dialogar. Nosotros tampoco hemos sido inconscientes como para no dar el diálogo. Pero no vamos al diálogo a firmar lo que quiere el gobierno. Si vamos al diálogo va a ser para plantear los temas que están acuciando a la clase trabajadora, a los jubilados, a los movimientos sociales, para ir a plantear que la gente no aguanta más; que acá hay que resolver cuatro o cinco puntos de manera inmediata y fundamentalmente, modificar el rumbo económico. Y el gobierno no quiere hacer eso. No va a hacer eso. ¿La CGT cree que el gobierno va a cambiar y va a modificar? La única forma para que cambie, será porque lo obliguemos y la única forma de obligarlos es con paro nacional, con mucha lucha, que no se agota el 30 de marzo.
Esta no es una batalla de un día, compañeras y compañeros. La derecha llegó al gobierno con el voto de la gente. Llegó con una mayoría, mínima, pero llegó. Y ése es un problema. No es lo mismo que el gobierno de este dictador de Brasil, Temer, que llegó al gobierno con un golpe de estado a Dilma. No es lo mismo que le pasó a Lugo en Paraguay. Lamentablemente, acá tenemos a este tipo que se está poniendo como líder de la derecha de toda la región y de gran parte del mundo. No se lo puede combatir solamente con consignas. Hay que debatir ideas y hay que discutir mucho con los compañeros que siendo combativos están dispuestos a luchar, pero siguen agarrados de sus viejas estructuras. Siguen creyendo que no pueden. Entonces mañana la CGT toca pito y se olvidaron de lo que pasó el 7 de marzo y se olvidaron de la historia. No hay que olvidarse de la historia. Nosotros tenemos que ir para adelante, pero con los espejos retrovisores puestos, sin olvidar que hubo mucha traición a los trabajadores y al pueblo. Sin olvidar, pero teniendo en cuenta que nunca hay que romper los puentes con los que quieren luchar.
Por eso, compañeras y compañeros, no me voy a extender. Queremos escuchar a varios compañeros que se han anotado. Queremos escuchar la opinión de los compañeros camino al paro. Queremos escuchar qué va a pasar de aquí en más.
Estoy totalmente de acuerdo que el 30 de marzo, por estas motivaciones que Hugo acaba de explicar, por lo que significa en la memoria colectiva, por Dalmiro Flores; por las luchas que se dieron en aquel tiempo, en el año 82, con la dictadura, el 30 de marzo tiene que ser la fecha del paro nacional. Debemos mantenernos firmes, pero tiene que ser un paro nacional, no quedándonos en la casa. Paro nacional con movilización a la Plaza de Mayo. Paro nacional con movilización en todas las ciudades importantes de la Argentina.
Paro nacional activo, aunque la CGT le ponga otro día. Después discutiremos a ver si unificamos o no. Pero en principio, este plenario tiene que salir con la firmeza de que esta unidad de las CTA no es para hablar al pedo. Es para poner fecha a la lucha, acompañar a todos los que luchan a lo largo y a lo ancho de Argentina.
Fuerza, compañeras y compañeros. Vamos a definir con toda la fuerza que nos da este camino de la unidad.