por Agencia Central de Noticias de Corea (ACNC)
Quizá no sea muy conocido en el mundo que el Imperio Japonés, antes y durante la Segunda Guerra Mundial, en sus campañas imperialistas sobre otras naciones y pueblos de Asia, cometió las peores atrocidades y masacres que se puedan imaginar. Como parte de estas acciones siniestras está el sometimiento forzoso de miles de mujeres surcoreanas como esclavas sexuales, durante la ocupación japonesa de la península de Corea.
Hoy el gobierno de Japón, con unos pocos billetes, ha comprado el beneplácito de los cipayos de Corea del Sur para hacer borrón y cuenta nueva de estos crímenes imprescriptibles.
A continuación el despacho de la Agencia Central de Noticias de Corea sobre esta nueva capitulación de los traidores de Corea del Sur.
en Corea del Norte las mujeres son pilar de la Revolución |
Pyongyang, 8 de enero (ACNC) - El Comité Coreano por Medidas (CCM) sobre el Problema de ex Esclavas Sexuales para el Ejército Japonés y Víctimas de Reclutamiento Forzoso, hizo pública el día 7 una declaración calificando de avasallantes las "negociaciones sobre el caso de consoladoras" realizadas a finales del año pasado entre el Sur de Corea y Japón.
El caso de esclavitud sexual para el viejo ejército japonés, crimen más bárbaro en la historia humana, no puede ser resuelto sin el reconocimiento de culpabilidad estatal y legal, la disculpa y la indemnización de Japón, señala la nota y continúa:
Sin embargo, las autoridades surcoreanas borraron este tremendo crimen de Japón, lo cual es un insulto intolerable no sólo a todas las víctimas de la esclavitud sexual en el Norte y el Sur de Corea, sino también a otros miembros de la nación y la sociedad internacional que demanda la responsabilidad y la disculpa de Japón y deviene una brutal violación a la justicia y la conciencia de la humanidad.
Lo más indignante del caso es que el presente "acuerdo" vergonzoso fue producto del control secreto de EE.UU. que pretende tomar la hegemonía esta región lanzando como brigada de choque a Japón, que causó incontables desgracias y sufrimientos a los pueblos asiáticos.
Es inválido el presente "acuerdo" inventado por el astuto país isleño incitando con poco dinero a los gobernantes surcoreanos.
Este hecho demuestra que las autoridades surcoreanas son una horda de traidores a la nación que se valen de todos los métodos para satisfacer los intereses de sus amos norteamericano y japonés.
Las autoridades surcoreanas deben tener presente de que su actitud vendepatria les traerá al arruinamiento vergonzoso.
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